Hiroshima está abandonada, esta replegada, esta nostálgica, esta abatida, está enferma, esta desgastada. Hiroshima, ¿En tu ciudad se puede amar?, ¿Cómo recuperarte de tanta muerte?, de tanta tragedia, de tanta maldad. Dos Amantes se encuentran en tus puertas, dos amantes solitarios, los llamaremos Francia y Japón, dos amantes hermosos físicamente, dos amantes con fuego en la piel, dos amantes con cicatrices y miedo, replegados, obsesionados, llenos de pasado, llenos de demasiado memoria. Los recuerdos, las vivencias se van entretejiendo con el presente, sobre el que prolongan su sombra, mientras las frases se repiten con insistencia en un ambiente atormentado, angustioso por la imposibilidad de deshacerse de esos recuerdos. Los dos han sido marcados por la guerra, y de la necesidad de sentirse vivo en medio de la tragedia.
Eso nos lo cuenta el director con un montaje en los que los flashbacks son una constante, junto con el uso de las imágenes que iban a dar cuerpo al documental originario, creando una narración en la que presente y pasado se entrelazan de una forma tal que el espectador queda atrapado en la tela de araña, y ya sólo podemos seguir el hilo que se nos va ofreciendo para ir desentrañando los misterios que ocultan los personajes a los que dan vida de una forma extraordinaria Emmanuelle Riva y Eiji Okada. Una película que tuvo un excelente recibimiento tanto por parte del público como de la crítica, que se llevó la Palma de Oro de Cannes en 1959. Hiroshima nos hace sentir desde el fondo, es una historia de amor sí, pero más es una historia de miedo, de lo que el hombre hace con su existencia y la existencia de todo lo vivo que lo rodea, la ciudad destruida es el reflejo de los personajes principales, que viven como víctimas de su propia guerra y de la guerra en si. Hacia el final, una toma y en un cine como referencia se ve en cartelera Casablanca, porque esta es la historia de personajes opuestos al filme clásico. Un filme enorme, grande, inolvidable, un cine lleno de maravillosa poesía y unas actuaciones de ensueño.

Él.- Eres como mil mujeres a la vez…
Ella.- Porque no me conoces. Por eso.
Él.- A lo mejor no es del todo sólo por eso.
Ella.- No me disgusta ser mil mujeres a la vez para ti.


Lo bueno

Las actuaciones, los personajes principales están genialmente creados.

El guion es una belleza, lleno de poesía literal y poesía visual, tiene una fuerza y una nostalgia.

Buena dirección, y maravillosa fotografía.

Lo Malo
Nada, absolutamente nada.

Apreciación personal: Una obra mayor, sentida desde el mismo inicio con esos primeros planos que irradian belleza, es curioso el amor y la belleza está en el amor de los protagonistas, en un lugar, en un mundo que parece haber perdido todo.