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Voto de antipseudo:
2
Western. Drama En 1882, en Nuevo México, el sheriff Virgil Cole (Ed Harris) y su socio Everett Hitch (Viggo Mortensen) reciben el encargo de pacificar Appaloosa, una ciudad sin ley que vive de las minas y que está dominada por Randall Bragg (Jeremy Irons), un despiadado y poderoso ranchero. Pero la llegada de Allison French (Renée Zellweger), una atractiva viuda, amenaza con destruir la larga amistad entre Virgil y Everett. (FILMAFFINITY)
1 de diciembre de 2008
71 de 138 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me siento estafado, me siento engañado, y seriamente indignado con este auténtico petardazo.

Como siempre voy a respetar profundamente lo dicho y escrito por otros usuarios y críticos, pero sinceramente me cuesta entender que encanto tiene este desastre.

Te venden una película plagada de buenos actores, te venden que es el mejor Western desde Sin perdón (permitirme que me parta de risa ante la comparación), te prometen, prometen y el final es nada de nada.

Lo único que hay en la pantalla es una pandilla de actores aburridos que no hacen una mala mueca durante toda la película. Parece que están diciendo: “Para que voy a actuar yo, si soy fulanito de tal”

Ridículo el personaje de Ed Harris, no hay quien lo entienda, carece de ningún tipo de personalidad, de pronto es violento, de pronto es un matón, de pronto un monaguillo de iglesia de barrio, personaje tonto y encima mal currado por el otrora gran actor, penosa actuación carente de cualquier tipo de garra, se lleva las pelas por la cara, y nunca mejor dicho.

Mortensen siempre ha sido un actor de pacotilla, pero desde que increíblemente se ha hecho famoso lo suyo ya es un abuso, lo suyo es una pose continuada durante todo el film, cara de aburrido (lo cual no me extraña viendo este esperpento de película), de sobrado, que me parece el colmo, y diciendo: “Hago lo que me sale de los huevos, que soy el Viggo”. Penoso actor con empanamiento permanente. En cuanto al personaje indefinible, no sé de que va.

Luego llega la Renée Zellweger, sobrevalorada actriz donde las haya, en esta peli no da ni una, se puso la sonrisa profidén al principio del rodaje, y pase lo que pase no la cambia en todo el film. Risita perpetua, ni un movimiento, ni un gesto, ni una mirada, lo único que piensas durante toda la peli es: “Esta tía es tonta”. Su personaje de risa, elaboración cero, trasmite menos uno y aburre un diez, gilipollez de personaje.

Con Jeremy Irons no me voy a meter mucho, ya que es lo único decente que tiene la película, bastante tiene el hombre con sacar adelante la tontuna de personaje que le han endiñado. De pronto es el tío más peligroso del mundo que una monjita de la compañia de Jesús con más miedo que verguenza, incomprensible personaje, sin ningún tipo de personalidad definida. El bueno de Jeremy hace tres personajes en uno.

Decorados de spaghetti western, planos forzados e indios vestidos de Armani son los últimos ingredients de esta soberana tontuna.

Me da igual que me fusilen esta crítica, pero alguien tenía que decirlo, esta película es un soberano coñazo sin sentido.
antipseudo
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