Admito que me identifico con personajes depresivos y que han sufrido durante mucho tiempo; llegando a comportarse como si ya todo les importara un comino. Si a esto le añades que el personaje es detective, alcohólico y obsesionado desde hace años con un caso que no pudo resolver, el panorama mejora mucho más.

A Adam Brody le van mucho estos personajes: diferentes, rechazados, marginados. Desde Seth Cohen en 'The O.C.' a Carter Webb en 'In the land of women', para acabar convirtiéndose en Abe Applebaum en esta película.

En la introducción nos encontramos que la historia y su personaje tiene momentos ridículos que hacen que el protagonista debido a su pasado, tenga que sufrir una humillación diaria por parte de aquellos con los que convive. Y pese a intentar levantar cabeza y seguir con su pasión detectivesca, siempre hay alguien que ridiculiza su trabajo; a veces, incluso, llegando a ser él mismo debido a la inseguridad que siente.

A medida que nos adentramos en la película, ésta adquiere misterio y despierta interés cuando suceden una serie de acontecimientos que indican que esto de ridículo tiene poco.

Aplauso para Brody y Nélisse en sus respectivos papeles.

7/10
PD: ¿Qué se supone que debes hacer cuando el pis te huele a pescado?