La serie tranquilamente podría haber terminado en el tercero o cuarto capítulo, los restantes me parecieron de relleno, nos salimos completamente del clímax, con una baja de tensión y atracción importante. Resumidamente, echa por tierra toda la gran carga dramática que había construido.

Comienza con un nivel alto e impactante, pero la tensión se va diluyendo poco a poco en los capítulos subsiguientes. Capítulos que, por decisión artística o de distribución, no le hacen justifica, ya que a pesar de durar apenas 30 minutos, más de uno no llega a sostenerse argumentativamente.

Porque justamente, a la historia principal se le intenta adosar una subtrama sosa e injustificada que aporta poco y nada al eje principal, haciendo que la narración se vuelva errática y tediosa.

Igualmente, por esos primeros tres geniales capítulos, es digna de ver.