Precuela de la original Camino Sangriento, de la que ya esperaba poco o nada, pero al ser una precuela, al menos pensé que darían mas detalles sobre los deformes caníbales, pero lo que se cuenta ya lo sabíamos y lo único realmente nuevo es el lugar en el que transcurre la cinta.

Un manicomio "abandonado" (pero vamos, que lo barres un poco y como nuevo, ni un graffiti, ni cristales rotos, nada, hasta la camas están nuevas), en el que como no, van a parar un grupo (bastante numeroso) de colegas (los más estúpidos y irritantes de las que llevo vistas), según llegan al edificio, empiezan a hablar y o señor que diálogos, que doblaje al español tan lamentable, las actuaciones pésimas y lo peor de todo es el gore, simplemente desapareció, se a bajado tanto el presupuesto que se ve que solo tenemos para las caretas de los malos, todas las muertes o ocurren fuera de plano o son un efecto digital muy cutre, hasta una de las muertas se ve que es un maniquí claramente.

Mira que creía que después de la soporífera tercera parte, mejorarían, pero no, contratan al mismo director de la anterior (y dirige la quitan parte también, santo dios), le bajamos el presupuesto y venga, haz les correr por todo el manicomio (al final siempre corren por el mismo pasillo y no estoy de coña, de sótano a sala del director y de ahí a celdas, poco mas sale), que hagan cosas estúpidas todos y cada uno de ellos, ya mueren por inercia, por inútiles, en esta película iba con los malos, deseando que mataran a todos para que acabara.

Muy pero que muy mala, no aporta nada, no consigue generar ningún tipo de tensión ni terror (mas bien todo lo contrario) y si aún encima le quitas el gore, pues apaga y vámonos.

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