Cuando ya estaba enfermo de cáncer de esófago, el gran Humphrey Bogart aún tuvo tiempo de rodar esta obra maestra que es Más dura será la caída. Una película que trata el tema de la corrupción pugilística y el precio de la dignidad de las personas.

Bogart encarna a un ambicioso periodista en paro y enamorado del dinero que se muestra capaz de cualquier cosa con tal de conseguirlo. Por ello acepta la propuesta de un manager de boxeo que quiere convertir en campeón con su ayuda, a un gigante recién traído de Argentina que a pesar de su presencia intimidatoria no tiene cualidades para boxear. Sin embargo con la publicidad y el montaje adecuados se puede convertir en un serio aspirante al título a cambio de una bolsa considerable del dinero de las apuestas. A medida que se lleva a cabo el engaño surgen las miserias de aquellos que están dispuestos a lo que sea con tal de enriquecerse haciendo trampas y Bogart empieza a tener remordimientos de conciencia.

Interesantísimo título del subgénero pugilístico imprescindible para cualquier aficionado al cine. Ha envejecido muy bien a pesar de que no cuenta nada que no sepamos pero el magnetismo y carisma de su protagonista hacen que sea un placer verla.