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Argentina Argentina · Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Voto de El Golo Cine:
7
Drama San Bernardo, Chile, justo antes que Allende asuma la presidencia, en una noche de borrachera, Jaime, un joven de 20 años solitario y narcisista acuchilla a su mejor amigo, El Gitano, en un aparente arrebato pasional. En la cárcel conoce a El Potro, un hombre mayor y respetado a quien se acerca necesitado de protección, ternura y reconocimiento. Jaime se convierte en El Príncipe y descubre el amor y la lealtad mientras asiste a la ... [+]
2 de julio de 2020
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
El drama carcelario El príncipe (2019) es la ópera prima del director chileno Sebastián Muñoz y está basado en una novela del escritor Luis Barrales. Se destacan las actuaciones de Alfredo Castro y Gastón Pauls.

Por Nicolás Bianchi

Desde el primer cuadro se nota la destreza visual de Sebastián Muñoz en su primer trabajo como cinematógrafo pero con una larga trayectoria como director de arte. Un charco de sangre que mana de un cuello abierto de alguien que está muriendo llega a los zapatos de su asesino, El príncipe, interpretado por Juan Carlos Maldonado.

El protagonista llega a una cárcel que se va a develar rápidamente como una suerte de selva homosexual en la que nadie parece estar exento de coger o ser cogido, en todos los sentidos que se le puedan dar a estas palabras. En paralelo a su vida como interno se muestra, mediante flashbacks, cómo El príncipe llegó a dónde está. Es, en primer lugar, el despertar (homo)sexual de un hombre, sus primeras experiencias que incluyen mujeres, su falta de control ante el deseo, su energía desbordada.

En prisión El príncipe cae bajo el control del experimentado Potro (Alfredo Castro), su mentor y relación más profunda, que rebalsa los límites del consentimiento y de la compulsión. Si afuera, en el Chile de los 70 en el que está por comenzar el gobierno de Salvador Allende, es obligatoria la heterosexualidad, en la prisión que narran Barrales y Muñoz se da exactamente lo opuesto.

El antagonista del Potro es El argentino (Gastón Pauls) que también va a jugar su papel en el camino de transformación de El príncipe. La película, que aborda temas como la sexualidad y el encierro, es un camino de formación de su protagonista. Un coming of age violento y a los golpes.

La composición de las escenas da cuenta de la experiencia del director en el departamento artístico. Dos hombres borrachos tirados en un calabozo con un inodoro sucio de mierda pueden componer una imagen bella. Una celda con presos hacinados también. Puede haber en ello un componente narrativo, ya que el protagonista de la historia aparece finalmente más cómodo en esos ámbitos que como ciudadano libre de una sociedad que lo trata de maricón. Pero también quizás haya algún exceso, porque al presentar de forma tan estetizada un lugar de encierro por momentos la película parece más una obra expresionista que narrativa.

Son extraordinarias las actuaciones de Pauls y Castro. Ambos apuntalan al protagonista, que redondea un buen trabajo aunque sin tantos matices en el rango expresivo. En otras críticas se pueden leer comentarios sobre el supuesto exceso del director al mostrar relaciones homosexuales, masturbaciones, genitales masculinos. Es una elección que tiene que ver con el tono y lo que se cuenta. En particular, hay tres escenas de sexo que narran aspectos importantes de la historia.
El Golo Cine
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