Una serie al estilo de esas que descubren algo pequeño o muy desconectado de cualquier cosa que mediante pruebas y deducciones logra transportarte al mundo de la ciencia forense.

Basado en un Instituto de investigación estadounidense, un apuesto y saleroso agente del FBI hace pareja con una guapa científica sin sentimientos y juntos descubrirán todos los crímenes que les pongan por delante. La primera temporada es muy interesante, presentando a los personajes, haciéndolos relacionarse y dejándonos conocerlos. En mi opinión pierde mucho cuando poco a poco todos los de la serie son chicos y chicas guapas que ya casi no parecen vivir de su trabajo, sino de la estupenda imagen que proyectan a todo el mundo, sabiéndolo todo porque son los mejores, con sus chistecitos cortos, sus suspicacias inteligentes y su superironía estupenda de la muerte.