Hay películas que cuesta trabajo criticar, y ésta es una de ellas.
Ello se debe a que, como es un thriller, no conviene contar mucho porque sería reventarla. Y en este caso en concreto, al ser una película del montón, tampoco se puede decir mucho ni en su favor ni en contra a nivel de calidad cinematográfica.
A su favor tiene la presencia de Hilary Swank, que todos sabemos que es buena actriz desde que boxeó con Clint Eastwood.
En su contra, que pasan muy pocas cosas. El acoso al que es sometida está soltera que vive sola en un viejo edificio no es tan interesante como en otros títulos del género.
No queda claro qué pinta aquí Christopher Lee. No es normal ver a esta leyenda viva participar en una película menor como esta, aunque tampoco es la primera vez que hace algo así.
Se hace larga siendo corta, y no sorprende demasiado cuando lo intenta. Simplemente se deja ver pero poco más.