Salvo el desnudo de Scarlett Johansson, ésta película es un completo fiasco. Pretendidamente filosófica en torno al encuentro entre extraterrestres y humanos es una completa invitación al tedio. Muchas veces hay directores que aspiran a una profundidad conceptual cuyo acompañamiento visual es el divorcio. Salvo los paisajes de una Escocia imponente y la belleza innegable de Johansson que procura sacar petróleo donde sólo hay aridez, todo lo demás es un completo despropósito.