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Voto de Jose_Lopez_5:
3
Comedia. Ciencia ficción Unos extraterrestres malinterpretan las imágenes de las máquinas recreativas como una declaración de guerra y deciden atacar la Tierra, empleando dichos juegos como modelos para el asalto. El presidente de Estados Unidos, Will Cooper (Kevin James), recurre entonces a su gran amigo de la infancia y campeón de las maquinitas de los años 80, Sam Brenner (Adam Sandler), quien actualmente trabaja como instalador de sistemas de home cinema, ... [+]
1 de enero de 2020
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"Pixels" es cine oportunista, malo y rentable. A lomos de la nostalgia ochentera que, al parecer, nunca termina, nos vende una comedia orbitando en torno a los videojuegos de aquella década. Aunque tuvo éxito, adolece de varias taras que la empujan al fondo del cajón.

Lo primero sus protagonistas, un atajo de oligofrénicos. Con Adam Sandler en vanguardia (su productora, Happy Madison, pone parte del dinero) y Kevin James, Josh Gad y Peter Dinklage como escuderos, la película trata sobre unos extraterrestres que se piensan que la vida en la Tierra es como en un videojuego. Por ello, nos declaran la guerra a modo de partida en una máquina recreativa.

Lo de de Sandler es una historia bien conocida. Tiene dilatada experiencia interpretando a personajes aberrantes a los que no querrías como compañero en ninguna situación. Y Kevin James y Josh Gard son otro par de cómicos educados en los mismos valores que Adam, solo que con mucho menos dinero en el banco. Donde va el primero, los segundos le seguirán para ver qué pillan. Finalmente está el enano de Dinklage, que no es mal actor pero, para la ocasión, interpreta a un chuloputas cargante que desata la peor de las lollypopguildofobias.

Lo segundo que patina son los malandrines espaciales que, y no exagero, tienen la mente de un puñado de párvulos. Un absurdo que se suma al surrealismo de la bobalicona sociedad yanqui de trasfondo. En otras palabras, que todos parecen idiotas. Esto supone tomar al espectador por imbécil y, claro, así no hay manera de sostener la suspensión de la incredulidad. No, al menos, frente a espectadores inteligentes.

Semejante pastiche culmina en una historia de redención, lo que es muy estadounidense, en donde unos perdedores se vuelven héroes gracias a una sociedad lobotomizada. Un subgénero cómico que casi seguro que tiene nombre propio, como ocurre con la comedia física ("slapstick"), el burlesque o la comedia romántica.

El único interés, que no pasa de la anécdota, fue la inclusión del personaje de Tōru Iwatani, creador del Pacman, por medio del actor Denis Akiyama. Lo mismo el propio Iwatani prefirió quedarse al margen y dejar que otro se comiese el marrón de interpretarle. A saber.

En la dirección, Chris Columbus, director especializado en cine con niños y para niños quien, no solo pone la otra parte de la manteca a través de su propia productora, sino que gusta de payasadas ocasionales. Con él en nómina ya queda claro que la inteligencia nunca fue bienvenida en el proyecto.

En cuanto a la originalidad, tampoco hay nada que aportar, porque estira un cortometraje homónimo del 2010 que, en esencia, era lo mismo pero sin humanos dando la brasa.

En resumen, un escupitajo en la cara del espectador inteligente en nombre de la morriña. Con $88 millones de presupuesto, hizo una taquilla de casi $245 millones. La gente es idiota, y Sandler y Columbus dos espabilados que saben cómo llenarse los bolsillos.

PS: El comentario que afirma que es un remake de "Los cazafantasmas" estuvo fino. Buen punto.
Jose_Lopez_5
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