Bámbola

Un punto negativo es el comportamiento del hermano. No se entiende que intente convencerla para que vaya a ver a ese tío sabiendo que está poniendo en juego su virginidad. El miedo y la tensión aumentan.

Vemos como la chica va reaccionando a medida que se encuentra con ese hombre. Él hace demostraciones de poder con las que trata de impresionarla, también le dice que se ha enamorado de ella, insinúa que podría ser un hombre cariñoso y protector. Ella muestra sentimientos de repulsa, le odia y dice que le da asco, la tensión entre ambos sigue aumentando. Enterarse del sufrimiento de su novio, la obliga a ella a tener que ir a ver a Furio solas para pedirle.

Ese encuentro (a espaldas del novio) es absolutamente demoledor. Él consigue sacar el lado sumiso de la chica. Quizá la adrenalina, el miedo y la excitación de lo prohibido hacen que ella termine por rendirse y, una vez que se ha quedado en ropa interior delante de él, se dispara la tensión sexual a todos los niveles. A través de sexo salvaje, ella experimenta emociones que nunca había sentido. Él la hace pasar por emociones de dolor antes de que pueda alcanzar las emociones del más puro placer y así, ella comenzará a aceptar que debe sufrir estando con él antes de alcanzar el placer del éxtasis.

A partir de ese momento todo cambia en la mente de ella, es lo que más rabia da al espectador, por injusto. Se le quita de la cabeza su novio, y ya no podrá dejar de pensar en este hombre ni en lo que sintió estando con él. Ese tipo despreciable ya no es uno más para ella, al desvirgarla se ha convertido en el hombre la ha hecho mujer, así es como ella le ve. Siguen sin gustarle muchas cosas de él, pero ya no puede hablarle con desprecio ni ignorarle, ahora es como un Dios para ella y le muestra su respeto y admiración ("Siempre me han gustado los hombres fuertes"). Le preguntan si la ha forzado y (después de dudar) dice que no, ahora le justifica todo ("me hizo daño, pero estoy confundida porque me ha gustado").

La ha vuelto loca por él e incluso la ha dejado embarazada. El hecho de que haya conseguido unir sus genes a los de ella también va a influir en los sentimientos de la chica ("Ahora le llevaba dentro, no podía olvidarle"). Después de reflexionar, ella decide volver a verle para intentar mantener una relación y ver si puede sacar su lado romántico y protector (si es que realmente lo tiene).

En este momento, pese a las artimañas despreciables de él todavía se nos puede acabar colando esto como un romance, dan a entender en algunos instantes que él puede llegar a quererla realmente, pero no...

En el último tramo todo se viene abajo, los encuentros entre Furio y Bámbola son momentos gratuitos que nada aportan. Otro punto negativo es el comportamiento de él, si mientras estaba en la cárcel se presentaba como un personaje malote pero a ratos astuto e inteligente, en el tramo final deja de serlo. Viendo cómo actúa de una manera tan descerebrada, no entiendes como ha podido salirse con la suya tantas veces.

Además, pese a que la chica ya está con él, sigue tratándola de manera lamentable, no hay manera de salvar la película al continuar por esos derroteros. Antes, nos podían colar que todo lo que hacía era para conseguirla a ella al precio que fuera pero ahora ya no hay forma de justificar ni de salvar nada por ninguna parte.

Pienso que se le fue de las manos a Bigas Luna el personaje en el tramo final. Tenía una buena idea y la supo plasmar en el segundo tramo, pero no daba para una película completa y la rellenó de cualquier manera. Lo mejor es el segundo tramo y las interpretaciones tanto de Jorge Perugorría como de Valeria Marini. Ambos transmiten muy bien todo lo que tienen que transmitir (esa catarata de emociones, especialmente las dudas y reacciones de ella antes, durante y después de haber estado con él, etc...) y es lo que a mi entender salva la película mínimamente.