The Guilty

Recomendación de alma gemela de esta página. La verdad es que superó mis expectativas; en tan solo ochenta y cinco minutos se nos cuenta una historia sencilla pero muy bien construida, a través de una tensión creciente y creíble.

Ausencia casi total de personajes; lo cual viene a demostrar que un buen guión, es la base y siempre lo será, del cine de calidad.

Jakob Cedergren interpretando a un operador del 112 emergencias, hace factibles los registros, a través de una medida y bien dosificada entrega. Un final forzado, aunque tal vez necesario.

Viendo esta película pensé en aquel principio de la filosofía oriental: "No actuar... permitiendo que la vida encaje"
Quien la haya visto me entenderá.

LA CULPA, pues esa es su traducción al castellano, es una nueva muestra de la increíble capacidad del cine nórdico para conseguir lo máximo con una producción mínima y que está casi, más cerca del teatro que del propio género en el que se mueve; el cine. Todo es un acierto en ésta película, desde la inteligente trama hasta la impecable interpretación del único protagonista físico, el policía Asger Holm, magníficamente interpretado por JAKOB CEDERGREN.

No son pocas las reflexiones que procura en el espectador, éste trabajo del director danés GUSTAV MÖLLER y que es capaz de desarrollar un auténtico thriller, en tiempo real y con los elementos más comunes de una rutinaria noche de guardia al teléfono del conocido servicio de emergencias 112, donde cualquier llamada puede ser la que desencadene la dramática historia que vamos a ver cómodamente sentados desde nuestras butacas y que contiene algunos giros realmente escalofriantes y muy en la línea de BLINDSONE, el último film noruego visto en el Zinemaldi e injustamente tratado por la crítica española que sin embargo, alaba sin fisuras, ésta película.

El cine escandinavo, por alguna extraña razón que quizás tenga que ver con su climatología extrema, es capaz de contar historias impactantes con poquísimos adornos, lo que hace que nos encontremos con una angustiosa sensación de desnudez psicológica ante los acontecimientos que te deja literalmente casi sin recursos para evadirte del argumento, por lo que las tramas, a tiempo real, de los últimos trabajos vistos en la cartelera, son mucho más proclives a la empatía , al introducirnos de lleno y sin aspavientos, en una historia que podría suceder a cualquiera y en cualquier momento.

Una grandísima película

"The Guilty" viene a jugar con los mismos ingredientes que "Buried (Enterrado)" de Rodrigo Cortés y "Locke" de Steven Knight, es decir, recursos mínimos para contar una historia que debe atrapar al espectador en un abrir y cerrar de ojos. Y lo consigue.

Un escenario único, un único personaje principal que interactúa con otros personajes secundarios mediante conversaciones telefónicas y un argumento lineal que tiene sorpresas que van irrumpiendo en los momentos más inesperados. Esos son los recursos con los que juega el director Gustav Möller y va aderezándolo con el drama del protagonista, un policia que parece reelegado a atender las llamadas de emergencia después de un episodio oscuro, y con el drama que vive una mujer que, al parecer, por su extraña llamada, deducimos que ha sido secuestrada.

El resto es una carrera a contrarreloj con mucha tensión e intrigada, que va creciendo al ritmo de las llamadas intempestivas, ahondando en el drama humano hasta resultar demoledor e impactante y con un desenlace espeluznante que está a la altura de su novedoso planteamiento. El trabajo del actor principal, Jakob Cedergren, que soporta todo el peso de la historia, es de una sobriedad y sutilidad aplastante y confirma que un producto de estas características, como ocurría con "Locke" y "Buried (enterrado)", adquiere la contundencia necesaria cuando se cuenta con un actor sobresaliente.

Muy recomendable, en todos los sentidos.

"The Guilty" me ha sorprendido. No suelen gustarme nada las películas donde no hay cambio de localizaciones y hay pocas personas en escena. Sin embargo, esta cinta ha resultado ser la excepción a esta regla.
El actor protagonista permanece contestando y haciendo llamadas durante toda la película y consigue mantener la atención del espectador, de forma que en ningún momento se hace lenta ni pesada.
El guión de la película contiene un giro muy inesperado y consigue dotar a la historia de un gran interés para el espectador. La situación que plantea al principio se va complicando más y más hasta un final sorprendente.
En definitiva, esta película es un gran ejemplo de que no hacen falta muchos actores para contar una buena historia. Ojalá más pelis así.

En 80 minutos, una sola locación y un solo personaje se puede generar tensión e intriga hasta el final. Para eso hace falta un buen guión y un actor y director capaz de llevarlo a cabo. Aquí ese pequeño todo que es "Den Skyldige" funciona con creces, construyendo una historia que comienza con un llamado de emergencia y la necesidad del protagonista de intentar salvar a una mujer, necesidad que tomará como especie de redención.
El tiempo en la película avanza a contra reloj para el protagonista y sin dudas toma de rehén al propio espectador, cine minimalista y extremo, sí, se puede lograr, aquí una gran demostración de ello.