Danyka

Danyka es un minimalista drama de bajo presupuesto, en el que el director australiano nacionalizado mexicano Michael Rowe en casi un solo escenario una playa mexicana, nos entrega una gratificante historia, demostrando una vez más que en cine menos es más.

Película de diálogos que no se hace aburrida, guión notable y actuaciones destacadas, en el que un un escritor maduro conoce a una liberal y coqueta adolescente, conservatorio ideológico y seductor que lleva a un hombre maduro hasta el limite de lo que está bien o esta mal socialmente hablando. Película que no se hace aburrida por su no excesivo metraje y guión muy bien construido.

Rowe planta delante de la cámara una playa, un grupo de personas (solo dos tienen relevancia), un monoblock/ hotel, algunos animalilllos autóctonos y varios diálogos que esquivan el bulto, aunque ya sabemos hacia donde van a dirigirse tarde o temprano. De esta forma se estructura Danyka, un ejemplo muy decente sobre como hacer buen cine con pocos recursos.

Los diálogos llevan la situación mientras dos cuerpos se adueñan cada vez más del encuadre. Vale la pena detenerse acá: la disposición de esta pareja-dispareja siempre resulta armónica. Se colocan a modo espejo la mayor parte del tiempo. Danyka suele romper esta armonía, provocando tensión con reacciones típicas de su edad.

La tensión de la peli es tema aparte. Se construye tangencialmente, de costado, mientras los diálogos captan temas de actualidad y sin verdadera relevancia...hasta el minuto 55. Esto ya es más personal: creo que el conflicto estalla demasiado tarde. Sobran pocos minutos para desarrollar de que trata en realidad Danyka, dejando chispas en el aire.

Tampoco se le puede objetar demasiado. Es una típica situación incómoda (marcada sobre todo desde la diferencia de edad y otros asuntillos), de esas que pueden estar a la vuelta de la esquina. Situaciones que pueden resolverse, o no, tal como las plantea Danyka.

Podemos leer arriba a críticos de 4a categoría que jamás han creado o dirigido algo y se tienen que desahogar con opiniones que demeritan el trabajo de los demás. Utilizando terminología rebuscada para parecer interesantes y autoconvencerse de que están realizando una critica profesional, tenemos opiniones como en la que dicen que la película es un BOSTEZO, sin embargo, son opiniones extremadamente pobres de pseudocriticos refugiados detrás de un teclado. La película es buena y es interesante su temática. Muy conscientemente abre debate sobre diversos puntos de vista que se tocan dentro de la misma. Felicidades, excelente película.

Si fuera un podcast en vez de una película, sería casi lo mismo. La película se centra absolutamente en los diálogos y casi todo el contexto visual está desaprovechado salvo por algunos detalles, como si visualmente no hubiera nada para contar. Sobre los dos tercios de la película me aburrí y la dejé de ver.