Daydream Nation

Con un intento demasiado palpable por parecer indie, con esa sensación en bucle que te da de que busca parecerse desesperadamente a Juno, y con ese plot twist tan malo justo en la tercera parte de la película... Sí, Daydream Nation es predecible. Y como han apuntado algunos aquí, no deja de ser otra comedia romántica de chica buenorra saca a chico inadaptado de su adolescente sufrimiento. Pero es diferente. Los flashbacks dejan mucho que desear, pero la voz en off consigue su propósito; el personaje de la protagonista está muy mal cuidado (no refleja humanidad, es difícil sentir empatía por ella), pero el del profesor amargado es hilarante si consigues pillar el humor negro del que está hecho; a la historia de los padres se les saca poquísimo jugo, pero la de los niños es entrañable en su rareza. Tiene muchos contras, es verdad, pero cada contra tiene un pro que los tapa, y esa imperfección disfrazada es lo que la hace tan interesante.

Nose si es porque a mi tambien me han llamado zorra sin serlo, si porque tambien se me murió mi madre de cancer y porque me colé de ese chico perdedor de la clase, pero me gusto la película. No esperen una obra maestra, sino una comedia romántica con un toque oscuro (gracias a las muertes de chicas jóvenes, que vuelve al pueblo paranoico y un incendio que nunca acaba) y narrado de una manera original. Un estilo (500) days of summer pero mas tétrico y adolescente. La banda sonora excepcional y una buena ambientación.

Caroline Wexler es una adolescente de la ciudad que se muda junto con su padre a un pequeño y aburrido pueblo donde no pasa nada, se siente incomoda en su nueva escuela, en la que no encaja con los jóvenes de su edad, ya que a pesar de sólo tener 17 años es más madura que el resto de sus compañeros de clase, es segura de si misma, inteligente y sexualmente activa, los ve con cierto desprecio e ironía, para ella solo son jóvenes ignorantes y apáticos, que lo único que saben hacer es drogarse para no aburrirse.

Así que cuando conoce a su profesor de literatura de nombre Barry, se siente atraída por él, es atractivo, encantador y carismático, al principio él se resiste, así que lo empieza a perseguir y acosar, hasta que cae rendido y empiezan una relación profesor-alumna.
En un principio todo marcha bien, pero siendo este un pueblo pequeño donde las apariencias son importantes y ante las constantes escenas de celos de su alumna-amante, él le sugiere que salga con alguien de su edad para guardar las apariencias.
Ella acepta salir con alguien de su edad, un poco para no aburrirse cuando no esta con él y otro tanto para darle celos, pero el chico con el que sale, resulta ser el mas estúpido e ingenuo de su clase, un perdedor, pusilánime, cobarde, al que su mamá le tiene que conseguir las citas, incluso cuando le dice a Barry con quien esta saliendo en lugar de sentir celos él se ríe y ambos terminan burlándose del joven pretendiente.

Hasta aquí la película parece interesante, tiene como trasfondo el ambiente de paranoia en que viven los habitantes del pueblo, ya que un asesino serial ha matado a varias jóvenes, todo esto narrado en voz en off con ironía y sarcasmo. Con efectos de flashback y saltos en el tiempo, hacen que uno tenga la sensación de que esta viendo una película diferente.

En este punto es donde la película se le cae de las manos, de ser alternativa, pasa a ser una cursi, romántica, predecible y convencional historia de amor.
Caroline se da cuenta en una noche que no siente nada por su profesor, a leer una novela autobiográfica de Barry se da cuenta de que no es lo que aparenta ser, en realidad es un fracasado lleno de manías y complejos.
Como es previsible corre a los brazos de su joven pretendiente al que milagrosamente le encuentra virtudes que los demás no pueden ver como es la inocencia y la fidelidad.

En resumen, no es más que una comedia del montón, donde la chica popular se enamora del perdedor de la escuela.

Se deja ver, sí, pero a ratos. Es la primer película director y guionista Mike Goldbach, y se nota: el montaje deja bastante que desear y la historia tiene tantos hilos que termina pareciendo una "película de problemas" de los sábados por la tarde en la televisión. Asesinatos, drogas y dramones que no vienen a cuento al terminar centrándose la historia en un triángulo amoroso más bien ñoño.
No quiere esto decir que esté todo perdido, sino que simplemente el director necesita más práctica. La pena es haber desaprovechado el magnífico elenco con el que contaba. Menos capítulos, voz en off y flashbacks, todo arrejuntado, hubieran ayudado. A veces es mejor optar por lo simple...

Daydream se esfuerza por no ser simple. Por no mostrar su reducción de base (el argumento es muy minimalista) en pro de una estructura narrativa compleja. Le interesa la forma, no el fondo.
Pero en esta peli forma y fondo van de la mano, y muchas historias buscan su metáfora inmediata: el incendio, el asesino, los niños, etc. El resutado es un cambalache por momentos ordenado y meritorio, y por otros una naranja demasiado exprimida con un jugo que termina salpicando para todos lados.

La prota tiene un carisma particular que hace atrayente la propuesta al tomarla desde su punto de vista. Ese medio se traslada luego al profesor y a otros personajes aún menores. Queda volando la idea obvia de retratar la filosofía de un pueblo pero haciendo incapié en personajes muy puntuales. Y la idea general de un incendio que corroe a todo el pueblo no termina de plasmarse, porque la estuctura narrativa abre ramas pero no las cierra todas, o no prioriza donde debe priorizar.

Termina quedando como una sensación de mareo generalizado que de a ratos queda bien parado y de a ratos se pierde en su propio juego.