Dentro del mundo de la animación todo parece dominado por dos polos: las producciones clásicas estadounidenses al estilo Disney-Warner y las producciones japonesas. Sin embargo hay producciones independientes, algunas de ellas bastante gamberras. Aachi & Ssipak es una de las más gamberras. Con un estilo extraño que no parece tan japonés como debería (las producciones coreanas tienden a parecerse a éstas), la película nos lleva de escena en escena de acción (todas ellas muy espectaculares y divertidas) sin un guión mínimamente coherente que hile todo. Es decir, más allá de las escenas de acción y del aspecto visual de la película, no queda mucho. algunos chistes divertidos, alguna situación simpática y muy, muy poco guión.

Pasable para los que le gusten los productos gamberros.

Gunbuster es una parodia de diferentes series japonesas de animación de los años 80, especialmente las de robots gigantes. Sin embargo, a diferencia de lo normal, tiene un guión que se sostiene fuera de las diferentes referencias a otras series, dando como resultado un producto que si se ve sin conocer otras series de la época, se puede seguir sin perderse, y si se conocen, además hace gracia.

Algo que puede ser extraño es el hecho de que a pesar de tener elementos paródicos, la serie tiene drama, mucho drama, siendo su último capítulo muy emotivo e intenso.

No es una serie redonda, pero tiene fuertes argumentos a su favor: un diseño más que aceptable, una animación competente y un acabado general muy bueno. La dirección es más que correcta.

Macross Plus es la supuesta continuación de Macross, sin embargo, para hacerse más accesible al nuevo público, la acción se sitúa una treintena de años en el futuro y no repite ninguno de los personajes de las series anteriores. De hecho, el argumento es radicalmente diferente y tan sólo utiliza el universo y algunos elementos propios de la franquicia como base. El resultado es muy bueno. Más adulta y reposada que otras series del universo Macross, Macross Plus es un producto bien acabado, bonito, original y bastante más sensible de lo normal. En sus 4 capítulos desarrolla una trama interesante, unos personajes bastante complejos comparados con lo que se esperaría del género (batallas en el espacio) y un acabado visual que en su momento fue de lo mejorcito. La banda sonora, de Yoko Kanno, es excepcional y junto a una dirección bastante competente dan a la serie un cierto aire lírico que funciona como contrapartida ideal para las brillantes escenas de acción. Hay dos versiones de Macross Plus, una como serie de cuatro capítulos y otra como película. La película es menos recomendable: resulta arrítmica por condensar la trama.

Un producto ideal para ver animación que no sea ni tan infantil ni tan adolescente, pero sin ser necesariamente un producto de experimentación.

Mobile Suit Gundam Seed renueva el universo de la franquicia Gundam (con más de una veintena de series y películas a sus espaldas) adaptado conceptos de las primeras series al público actual. Aunque tiene cierto interés (a los aficionados a gundam probablemente les guste bastante), tiene poca originalidad, su acabado técnico no es de lo más brillante y su guión resulta a veces plano y predecible. Dentro de la franquicia Gundam hay productos más interesantes tanto por guión como por acabado técnico (la más reciente Gundam 00 sin ir más lejos). Sin embargo, los aficionados al género de robots gigantes humanoides probablemente les podrá entretener e incluso gustar, ya que su mezcla de robots, conflictos bélicos, dudas ético-morales (Gundam no se caracteriza por ser una serie con argumento maniqueo) y drama ha funcionado y funciona desde hace años. Por lo menos en Japón.

Mobile Suit Gundam 00 es la última encarnación de la franquicia de series Gundam. A los aficionados a éstas es probable que guste (tiene múltiples cualidades), pero para los que no conozcan estas series hay que avisar de que es un producto con un carácter muy marcado y no siempre fácil de digerir. Básicamente trata la historia de una organización que hace ataques selectivos en diferentes conflictos para acabar con las guerras. Todo ello pilotando robots gigantes humanoides. Técnicamente es más que correcta y el guión es interesante y está bien hilado (hay mucha intriga y no se caracteriza precisamente por ser simplón o poco intrigante). Sin embargo, la serie tiene muchas concesiones al género de robots gigantes, por loq ue más de uno se puede cansar del exceso de pirotecnia y de armamento futurista y fantasioso. en sus 52 capítulos, la serie pasa de una arranque lento y sin demasiada fuerza a un nudo lleno de intriga y de ahí a unos capítulos finales dramáticos y épicos. Aunque sin ser especialmente original (evidentemente bebe mucho de otras series de la misma franquicia), es de lo mejorcito de su género.