Haz click aquí para copiar la URL
Críticas de Ismael Alzola
<< 1 50 60 62 63 64 65
Críticas 325
Críticas ordenadas por utilidad
8
28 de octubre de 2021
1 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Wes Anderson es un director con un estilema perfectamente claro y diferenciador. Su cine es conocido por muchos y es variada la cantidad de espectadores que se sorprenden en cada película de su filmografía. “The French Dispatch” (Wes Anderson, 2021) otorga atributo a esta consideración y conforma extendidamente los estándares conceptuales del cineasta.

Es un espectáculo, una dosis de elevada energía narrativa para un compendio de diferentes resultados que exponen abiertamente cómo usar una escenografía de la forma más teatral posible. Sus encuadres tienen siempre un exceso riguroso y completo; todo plano está lleno, abarrotado, como la extravagancia superficial y espacial de una representación teatral.

El gran acierto es toda la capacidad que su elenco posee para hacer florituras y acuerdos conmovedores con el espectador, casi como si estuviese a punto de romper la cuarta pared. En esta dialéctica su extensa narración aborda un desafío que consigue esculpirse bajo toda circunstancia. Su guion está formidablemente construido, su exquisitez en demostrar de forma tan desarrollada una idea tan sencilla y con equilibrio entre la diversión y la gran cantidad de perspectivas, situaciones y los increíbles sucesos acontecidos es claramente demostrable.

La belleza de este filme está vinculada sobre todo con su apartado técnico y por el hecho de demostrar la capacidad de engrandecer el arte del cine, exponer su innovación cultural y presentar una marcada y personal huella de identidad tras las cámaras y las salas de cine. Ojalá todos los periódicos estuvieran custodiados con la magia, nobleza y dedicación que parece trasponer Wes Anderson bajo el sinónimo de hacer películas.
Ismael Alzola
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
6
10 de julio de 2022
6 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Takia Waititi había elevado la popularidad de las adaptaciones cinematográficas de un personaje que no había conseguido representar el carisma de su avatar comiquero hasta "Thor: El Mundo Oscuro" (Alan Taylor, 2013), a partir de "Thor: Ragnarok" (2017) esta saga de películas encontró un nuevo estilo y una identidad algo más definida. Bajo el aluvión de diferentes críticas y juicios ante este cambio de look, el personaje conseguiría su mejor versión en las últimas películas que formó parte del conjunto Vengadores dirigido por los hermanos Russo. En "Thor: Love and Thunder" (2022) hay una quimera.

La etapa de Jason Aaron está filtrada bajo la proyección de su director, que junto a la mano de Kaytin Robinson, enhebran un guion que no puede tomarse en serio. Esto no era ninguna sorpresa, pues la parodia y el humor absurdo es marca del hogar Waititi, y no había supuesto ningún problema si el argumento no presenta ninguna condición precisa o estrictamente formada por una tonalidad menos infantil. Sin embargo, los propios caracteres cinematográficos de su director trasladan al espectador a dos películas diferentes, lo que supone una pérdida de verosimilitud y sincronía con la historia que se presenta.

Por suerte Christian Bale le recuerda a Kevin Feige y a Louis D´Esposito la capacidad actoral y la inmersión de un trabajo bien hecho, asumido desde el principio con el respeto y la coherencia de una historia bastante interesante en sus orígenes, algo que no puede decirse del arco argumental de Natalie Portman, es decir, existe otro hándicap al convertir en un papel secundario lo que realmente se prefiere como una importante y esencial trama para el conjunto de sus personajes, lo cual hace que el producto de esta enorme resta sea un Chris Hemsworth convertido en un "diosificado" guardián de la Galaxia, o más bien, una buena figura paterna.

Entretenida, quizás olvidable, alternativamente épica, sentimentaloide: adjetivos a tener en cuenta en esta nueva entrega donde el UCM afirma sus defectos y exterioriza sus virtudes en un sentido ampliamente misterioso, casi como un baile de cojos que lloran de felicidad por poder aguantarse en pie. Tiene al menos esa gracia que procura no asemejarse a lo que Kenneth Branagh elaboró de forma cómica y fatigable. Ya llegará el Valhalla, por lo menos para Ciacchino, que se merece el descanso eterno después de tanto trabajo.
Ismael Alzola
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
2
25 de febrero de 2020
1 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ay dios, que cutre. María Ripoll presenta un filme que lejos de hacer llorar, hace que forzosamente sientas lo dura que es la película por el caso que trata. Las escenas de “humor” están hechas para que te rías pero sin embargo, el trasfondo que se define es el de la trágica evolución que posee la enfermedad, por lo tanto, no se qué lógica hay en poner en situaciones “duras” planos y recursos narrativos análogos a la comedia. Otra cuestión es lo predecible que es el hilo argumental, lo que denota que la película se preocupa más en sacar las lágrimas del espectador en vez de mantener una coherencia que indique un guión a la altura de lo que se propone. Viendo los clichés y los adaptados leitmotiv que se repiten se observa lo último que estaba yo diciendo sobre la función que se le está dando al argumento. Me esperaba más y sobre todo mejor reconstrucción del caso que puede tratarse con mejor conciencia y con un desarrollo mejor estructurado, sin la vergonzosa pretensión de vender klineex y lágrimas para dar a entender “lo bonita que es la película porque refleja un caso real”. Por otro lado, las actuaciones son correctas y la actriz Inma Cuesta hace una labor que destaca sobre los demás actores y en mi opinión, es lo único que destaca en comparación con la película en general.
Ismael Alzola
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
6 de mayo de 2022
6 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
Entre tanto festival de series, películas y nuevos personajes para esta nueva fase del UCM, lo que se esperaría es el aplauso infantil, torpe y caprichoso de una dosis de fanservice desenfrenado y caóticamente al gusto del fandom. Pero no, si bien el bueno de Raimi ya no tiene el porte único de sus películas más icónicas, todo en "The Multiverse of Madness" (2022) es irresistible al deleite, o, al menos, a la apreciación.

Técnicamente desarrolla un potencial tremendo para encajar unos buenos juegos de luces y jugar con la tensión de sus momentos más terroríficos, equivalentes a planos y secuencias que recuerdan al mismísimo "Evil Dead" (Sam Raimi, 1981), porque lo que no sobra en este filme son recursos estilemáticos, que, aunque se sepa soberanamente que la productora es la que lleva la última palabra, hay bastante más esmero y originalidad artística en esta cinta.

Su hándicap habitual es el formato de marketing empresarial de Disney que abduce a todo espectador a consumir todo producto para disfrutar de una película con la sintomatología de un evento narrativo en lo que a cómic se refiere. Sin embargo, dentro de su contexto es ligeramente fresco, inteligente y bien ajustado. Construida narrativamente con mejor tacto y justificando correctamente todo pequeño desvío hacia lo inasumible y a la sorpresa, además de poseer a un Elfman con la madurez y sobriedad de haber trabajado anteriormente en el género.

"¡Qué electrizante era mi Elizabeth Olsen!" Probablemente uno de los personajes mejor desarrollados y con uno de los arcos argumentales más potentes de todo el UCM. Sam Raimi ha hecho un trabajo rememorativo, de la mano de un Michael Waldron animado en escribir un guion que-esta vez sí- se hace eco del Ditko más imaginativo y de un Jonathan Hickman que exprime sus esquemas de creación literaria y fabrica para el futuro al mismo tiempo que condensa en su mágico presente nuevos caminos para la franquicia de Kevin Feige.
Ismael Alzola
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Lightyear
Estados Unidos2022
5,8
11.393
7
19 de junio de 2022
13 de 43 usuarios han encontrado esta crítica útil
En el 1995 empezó una historia sobre juguetes que cobraban vida llamada "Toy Story" (John Lasseter, 1995) y con el paso de los años derivó en una saga de películas hasta que en 2022 se estrena el spin off de uno de sus personajes más emblemáticos: Buzz Lightyear. Pixar no sólo acomete una divertida película para su público más infantil porque con el uso de referencias a otras películas del género de ciencia ficción y el tipo de argumento desde donde se proyecta la película se apoya en un disfrute diverso en cuanto a la edad de sus espectadores.

Sus referencias a obras como "Capitán América: Soldado de Invierno (Russo Brothers, 2014), "Alien: El octavo pasajero" (Ridley Scott, 1979), "2001: Una odisea en el espacio" (Stanley Kubrick, 1968), "Los Vengadores" (Joss Wheedon, 2012) y "Star Wars" (George Lucas, 1977) entre muchas, elaboran un guion bastante poco original, debido a que se apoya en otras películas para crear una historia que sea reconocible e intentar que se piense poco en sus clichés habituales y su maniqueísmo simple.

Aún sabiendo que no hay mayor sorpresa salvo su entretenimiento y su buen uso de las herramientas y narraciones antes vistas en el género, su música es totalmente perfecta para los personajes y el heroísmo que plantea redescubrir a un personaje que ha sido conocido en otras circunstancias y deconstrucciones. Lo que Angus MacLane expone es una exploración y una creación totalmente nueva de un personaje bastante encasillado en su identidad durante mucho tiempo atrás.

Es por eso que la ironía de que sea totalmente similar al Capitán América del UCM y que el actor que lo interpreta otorgue su papel en este spin off, es decir, Chris Evans, es algo bastante a tener en cuenta. Michael Giacchino emplea un trabajo que podría tener ecos al porte musical de Henry Jackman para dicho personaje del UCM en su trilogía, lo que demuestra la base por la que se sustenta todo el potencial de "Lightyear".

Para los más pequeños y no tan pequeños, la totalidad del filme supone un gran entretenimiento y un disfrute a la altura del desafío que plantea Pixar con este largometraje, el fallo sería esperar mucho más de algo que de por sí ya rompe con la tendencia natural de las franquicias cinematográficas conocidas y que arriesgan más de lo que ganan con la explotación de ciertos productos de sus anteriores entregas.
Ismael Alzola
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 50 60 62 63 64 65
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow