Una trama medio enredada para una historia corta y llevadera. Un joven y promisorio abogado, candidato a gobernador antes que fiscal, se enreda por su novia en una trama donde hay un cadáver, y el se acusa a si mismo para proteger a su novia, quien era acosada por el ahora cadáver: un mafioso de poca monta.
La duración de esta película y la actuación de dicho abogado creo que merece la pena verla.

Tengo buen recuerdo de esta pelicula que ví en Mayo pasado, sobre todo por el talento interpretativo de Ray Milland y la forma en que se las arregla el director y los intérpretes para hacerse entender sin pronunciar una sola frase a lo largo de toda la película. Realmente es muda sin serlo.
Recomendable sobre todo por eso y por la presencia siempre inquietante de Milland.

Tampoco hay que desmerecer a Ed Bigley, un actor de películas varias, que siempre deja una marca con su personaje.
Destacado es el papel de Shelley Winters, en una historia que parece que robar es más fácil que ganarse la vida decentemente.
Una buena película de un maduro Ryan.

¿Cómo dejar de valorar la actuación de un sobrio y siempre galante Bogarde?
Son pocas las veces que lo ví actuar, pero siempre se destaca por su flema inglesa. Esos años el cine de ese país me parece que fué el mejor de su historia, ya que quién puede dejar de lado a otros monstruos como Michael Caine, por ejemplo.
Es un filme simple, con un poco de suspenso y otro poco de comedia, donde la belleza e ingenuidad de Jean Simmons también se destaca.
Más que aceptable.

Un Charles Bronson ya en edad madura, no es el apache ni tampoco el policia con sed de venganza, sino un hombre simple, que trata de cosechar sus sandías...
Parece que la pelicula no vale nada, sin embargo el personaje del jefe mafioso le dá un carácter violento a la misma y a la vez de un tema relativamente simple, se despacha un filme entretenido y recomendable.