Bird es el cine. Bird es Charlie Parker. Y Clint Eastwood. Charlie Parker es William Munny con un saxo alto. Bird y Charlie Parker son como la heroína, como el scotch and milk: destruyen, pero hipnotizan. La heroína calma el dolor del hígado, del corazón, del alma, pero el dolor es siempre más fuerte. Charlie Parker es el perdedor que tocó las notas más altas del universo , el Stravinski del jazz. Pero no hay Charlie Parker sin heroína, ni sin dolor, y no hay William Munny sin dolor y sin condena. Y la condena pesa sobre Charlie Parker, y es impuesta y autoimpuesta, y no hay otro dolor que el que uno decide soportar. Y en una noche de lluvia y de muerte, mientras la televisión juega sus cartas y hace reír a Charlie Parker, su corazón decide rendirse al dolor. Y en los antiguos garitos de jazz de la calle 52 de NYC donde el dolor de unos negros tocó las notas más altas del universo, las nuevas strippers y los de la brigada anti-vicio bailan animados, cargando el ambiente con el humo del tabaco mientras beben sus scotchs and milk.

Acaso sea eso la otra vida.

Sin duda, una de las mejores películas del género negro. Impecable la dirección de Scorsese, con un guión denso que en ningún momento da respiros al espectador. Impecables actuaciones de De Niro, Liotta y Pesci, y ese aire glamouroso del cine de gángsters elevado a la enésima potencia. Genial.

Una obra maestra, un clásico para la historia. Lo que iba a ser sólo otra película de Bogey se acabó convirtiendo en la película por excelencia, gracias a un guión inteligente, a unas actuaciones de Bogart y Bergman sólo calificables como sobresalientes, y a una estupenda dirección donde no sobra ni falta un plano ni un solo segundo de película. Grande, muy grande es Casablanca; cuesta mucho salir de ella. Imprescindible.

Excelente película, clásica del género de terror, dirigida de forma muy inteligente por Roman Polanski. Sin grandes alardes técnicos ni ostentosos giros de guión, consigue mantener al espectador pegado a la pantalla e inquieto hasta el final del metraje, que aunque no es original ya que se han ido dejando bastantes pistas a lo largo del film, es a un tiempo estremecedor y desconcertante. Desde luego, leer el título en español ayuda a ir captando pequeños detalles de la película y de que así no resulte tan intrigante o sorprendente como pudiera serlo con el título original de Rosemary's Baby. Aún así, un must-see, sin duda alguna.

Película más que aceptable. Es una idea interesante y original; sin embargo, en mi opinión, la parte "central" de la trama se alarga demasiado a través de isotopías reiterativas innecesarias, y muchos elementos de la parte final del relato parecen cogidos con pinzas (la parte acerca del padre de Alex, por ejemplo), pudiendo llegar a hacerse pesada. Aún así, es recomendable su visionado.