Un acaudalado hombre de negocios, su histérica mujer, un ex abogado de medio pelo y un socio cuya fidelidad está en entredicho , con estos ingredientes tenemos el telefilm perfecto para una película soporífera para la tarde del domingo. Pero si a todo esto le añadimos además dos grandes actores, una trama bien elaborada y una sabia dirección el tesultado es una gran película que te atrapa desde el principio y cuya tensión no decae hasta el final.
Señoras y caballeros ahora saben ustedes quién mató a Jeison Rut, por favor no desvelen a nadie el secreto.

Nunca he sido aficcionado a los musicales, por lo tanto esta crítica es puramente personal y está condicionada por este hecho.
2 buenas actrices,( Marilyn lo era a pesar de abusar del papel ingenua) un gran actor secundario
(Coburn), unos dialogos a veces estupendos y uno de los mejores directores de la historia no bastan
para hacer una buena película, esta de la que les hablo es un claro ejemplo. Además de todo ello el final es bastante predecible.

Después de haber leido 18 críticas a esta película poco mas se puede decir salvo lo siguiente, ¿soy yo el único que se ha dado cuenta de que Gene Hackman es uno de los grandes?. Si , si..... a la altura de los Tracy, Láncaster,Stewart, Peck, Clift, Grant....... Su actuación es magistral y a mi juicio sobresale
sobre el resto de los actores de manera clara , para colofón verle vestido de mujer es una de mis escenas preferidas de los últimos 20 años.

Esta película podría pasar perfectamente por una de serie B.... pero actuaban en ella Gary Cooper y
Loretta Young, ( además del estupendo Dan Duryea ). El primero haciendo un papel de tímido que se crece, repetido en alguna otra ocasión (bola de fuego), la segunda haciendo el papel de chica guapa que hace algo mas que ser consorte del protagonista y el tercero haciendo estupendamente de malo, papel que repitió muchas veces,( la mujer del cuadro ).
Atención al que para mí es el mejor beso en una película del oeste y al que he hecho mención el el
título, Gary Cooper responde a un beso en la mejilla dándose la vuelta, dejandose el sombrero sobre la silla de montar, limpiandose la comisura de la boca con el antebrazo y el dorso de la mano, todo ello con parsimonia, tomándose todo el tiempo que la ocasión requiere, y entonces coge a la chica... y la besa, solo por esta escena ya merece la pena ver la película.

Una familia desgrana las miserias y odios acumulados durante años en el transcurso de un día y parte de la noche.
Familia formado por:
La madre, (C. Hepburn) drogadicta, beata y medio loca
El padre, (Richardson) ex actor venido a menos, con ínfulas y avaro hasta el extremo
Hijo mayor (J. Robards) borracho y vago
Hijo menor (Stockwell ) tuberculoso a punto de entrar en un sanatorio y el único cuerdo
Con la misma estética y director que 12 hombres sin piedad, sin embargo no resistiría ninguna comparación con esta última salvo en el apartado de las interpretaciones, magníficas de todos ellos,
incluida una Hepburn rozando el límite de la sobreactuación pero sin transguedirlo, ( de hecho en los papeles de loco, borracho o disminuido psíquico es muy dificil saber donde está el límite, pues estos mismos, en la vida real no lo tienen)
Después de ver la película uno se pregunta, ¿ como serán las cenas de nochebuena en esta casa?