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España España · Madrid, Jaca
Críticas de jaly
Críticas 779
Críticas ordenadas por utilidad
9
14 de junio de 2011
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Y a la tercera fue la vencida. Después de dos encantadoras aventuras que enamoraron a toda la audiencia infantil y gustaron a todo el público adulto, llegó El Prisionero de Azkaban para poner en las narices de todos los escépticos la originalidad, profundidad y madurez del mundo de Harry Potter.

Porque lo que era colorista y barroco en las dos primeras cintas, se convierte aquí en un mundo sombrío y gótico, en el que el poso de un director con un talento descomunal se nota en la narrativa de la cinta, en el ritmo que imprime a sus actores, en la particular pero avasalladora belleza de su fotografía (tanto da si es digital o real, es de un romanticismo extremo)...

Alfonso Cuarón, maestro del cine de estilo (como lo fueron La Princesita, Grandes Esperanzas, Y tu mamá también o Hijos de los Hombres), parece el director anti tipo para una franquicia comercial de las dimensiones de Harry Potter, pero consigue darle a esta saga, y a su protagonista, el toque que necesitaba para adquirir importancia, y por consiguiente, emoción.

Es esta una película sembrada de ideas y lecturas, de revisión de los mitos (la adivinación, los licántropos, los viajes en el tiempo, las criaturas mitológicas) que la autora ya revisó en la novela, pero que con las imágenes de Cuarón adquieren vida propia, haciendo que nos fascinemos con cada lugar en que coloca la cámara, con cada tono con el que baña una escena, con cada brote de imaginación que emana de los fotogramas y con cada secuencia inolvidable con las que reformula las bases de la saga.

Cuarón dio claramente a Harry Potter lo que necesitaba, una ruptura y contrapunto a las lúdicas pasadas aventuras, que hace que los personajes crezcan y sean más humanos, pero a la vez más excepcionales. Su drama, su tragedia, su destino, ya se hacen inevitables, como debe ser en toda historia con un gran héroe.

Y además, las incorporaciones y la creación de personajes como los de Emma Thomson, Gary Oldman, Timothy Spall, David Thewlis, hacen que Harry Potter se esté haciendo mayor, pero también que su historia se esté convirtiendo en algo mucho más grande.
jaly
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5
3 de junio de 2011
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
El Padrino, parte II. Heat. ¿¿¿¿¿Asesinato Justo????? Estoy de acuerdo con que ya está muy manido el criticar a Pacino y De Niro por el descarrilado debacle de sus carreras, pues en los últimos años, además de bodrios insufribles, también han participado en buenas películas como Descubriendo a John Cazale, El Buen Pastor, You Don´t Know Jack o Ángeles en América. Pero es inevitable preguntarse que pasó por sus cabezas cuando decidieron que Asesinato Justo sería su tercera película juntos tras las obras maestras que fueron la segunda parte de El Padrino y Heat.

De acuerdo, Asesinato Justo no es totalmente infumable, pero no difiere demasiado de cualquier producto de videoclub protagonizado, por ejemplo, por Eric Roberts. Está filmada con una desgana tremenda (Jon Avnet es uno de los realizadores con menos imaginación que recuerdo), es previsible hasta decir basta (ese final, por muy absurdo que sea, me lo olía desde el primer plano), y cuando quiere ponerse profunda, a lo Taxi Driver nada más y nada menos, provoca carcajadas.

Es cierto que es medianamente entretenida, lo mismo que cualquier cinta de un ciclo de acción de Antena 3, y que De Niro y Pacino, aunque sea en productos tan mecánicos como este, tienen una profesionalidad incuestionable, pero ambos deberían pensar en todo lo que han hecho por el séptimo arte, y tratar de volver a ello. Aunque sólo sea de vez en cuando.
jaly
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5
4 de mayo de 2011
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si la actriz protagonista de La extraña que hay en ti no fuese una intérprete tan gigante como Jodie Foster, probablemente esta película no tendría ningún interés, más allá de ser un entretenimiento de acción tipo las películas de venganzas de Mel Gibson, Bruce Willis, o últimamente, Liam Neeson.

Pero el protagonismo de su estrella, conocida progresista y pacifista, da una vuelta de tuerca a la visión, y sobre todo a la calidad, de La extraña que hay en ti.

No obstante, en base, esta cinta es una película fallida. Lo que podría haber sido (y quiere ser), es una aproximación moderna y femenina al desgarrado cine social que en su día fue Taxi Driver, una especie de tratado sobre una persona que se toma la justicia por su mano y las repercusiones emocionales y morales de esos actos.

Pero el problema de La extraña que hay en ti es que no se posiciona en absoluto, y ni cuestiona, ni juzga, ni ensalza los violentos actos de su protagonista, pese a pretender estudiarlos. Esto hace que el mensaje de la película se quede en nada y que su género se tambalee hacia el thriller más rutinario. Así uno se explica el porqué de la incursión de un personaje tan poco interesante como el del policía y su inverosímil relación con la protagonista (también lastrada por la aburrida labor de Terrence Howard).

Por suerte, la mayoría del metraje está dedicado a Jodie Foster, que es, como todos sabemos, una actriz extraordinaria, capaz de darle hondura y trascendencia a un guión que no lo tiene en absoluto, y que es lo más creíble de esta increíble película, un solitario y herido personaje en la vorágine de la gran ciudad.
jaly
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8
3 de marzo de 2011
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
No es fácil analizar Two Lovers. Formando parte del género (tan antiguo como previsible, todo hay que decirlo) del melodrama romántico, Two Lovers se aparta de todas y cada una de las convenciones de esta clase de películas, pero no para acercarse a otro género, sino para hacer de lo cotidiano el arte de una película, y de la sutileza su mensaje más profundo.

Por ello, sí es fácil que muchos se aburran con esta película, o simplemente, que no se emocionen como se espera de un drama romántico en toda regla. Pero detrás de la aparente “normalidad” de todos los conflictos, situaciones y personajes de este filme, bulle la tragedia diaria del amor no correspondido, de la depresión clínica y de los sueños que no hemos podido cumplir.

Por eso es loable la labor de James Gray (más especializado hasta la fecha en cintas más adrenalínicas pero no por ello menos profundas: las excelentes Cuestión de Sangre, La Otra cara del Crimen y La Noche es Nuestra) tras las cámaras y con el guión, siendo capaz de aportar un tono denso y dramático – en el mejor sentido de las palabras – a situaciones habituales y cotidianas de la vida de varios individuos, hasta llegar a una resolución tensa y trascendente, en el que las lágrimas o las grandes catarsis no sirven de nada, pues nada hay más doloroso que la simple vida de verdad.

Una pareja a la que hemos visto en papeles mucho más vistosos resalta por encima de todo: Joaquin Phoenix y Gwyneth Paltrow realizan unas espectaculares composiciones en base a muchas cosas que no sabemos desde el texto pero que laten en su historia. Ellos y su excelente director hacen de Two Lovers una experiencia apasionante para todo aquél que se atreva a mirar bajo la superficie para enfrentarse, como estos dos personajes, al amor más absoluto, aquel que nos hace capaces de cambiar totalmente nuestras vidas; y también a aquél que puede terminar por destruirlas.
jaly
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8
22 de enero de 2011
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con el gusto habitual de las producciones del subgénero monárquico británico, El discurso del Rey no es la película académica que muchos han comentado. Cada vez que se estrena un film de este calibre, se le acusa de ser técnicamente perfecto, pero igual a todos los anteriores. Pero El discurso del Rey no es así, pese a que muchos se empeñen en subvalorarla empleando tan manido calificativo.

Por un lado, la estética de la cinta va mucho más allá de la corrección británica. Sólo hay que fijarse en el uso de la luz y los ambientes. Casi toda la película transcurre entre brumas y espesas nieblas, augurando, a modo de película de espionaje de los años 40, los tiempos a los que se abocaba la nación. Los decorados, a su vez, apoyan los matices emocionales de unos personajes en absoluto tópicos: desde la austeridad de las alcobas de Jorge VI, hasta la ostentación de sus burócratas o el surrealismo pictórico y arquitectónico de Lionel, a su vez rara avis de su tiempo.

Si en algo El discurso del Rey es una película 100% británica es en la importancia de sus actores, o más bien, de sus personajes. No hay en ellos ni un lejano eco de vulgaridad, ni en su concepción dramática un ápice de compasión. Están tan bien construidos que la historia, pudiendo haber sido un vergonzante panfleto monárquico y de la muy utilizada superación personal, se convierte en un inspirador ejercicio de constancia y creencia en uno mismo, pero sobre todo en un conmovedor retrato de que la amistad afecta a todos aquellos que conciban la humanidad como un fin (por mucho que haya guerras y fanáticos con bigote de por medio).

Y por eso es tan apasionante la cinta. Sobre todo por dos nombres: Colin Firth y Geoffrey Rush. Dos hombres que son capaces de dotar de sentido del humor a la mayor de las tragedias, y de dimensionar la importancia histórica de un trono hasta conmover al espectador. Dos actores en el sentido pleno de la palabra, merecedores de todas las reverencias que se hacen al final del metraje y de muchas, muchísimas más.
jaly
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