Una especie de híbrido de varios géneros, sin acometer ninguno con soltura. Sus diálogos y personajes resultan ambiguos, de caracterización incalificable.

Ana Kokkinos, su directora desea encauzar a su personaje principal, tal vez para que lo entendamos en su incongruencia; si bien, los recursos que utiliza no resulten eficaces. Una banda sonora molesta, inadecuada para la narrativa visual; haciéndose acompañar de un guion impreciso.

Tal vez un cinco le venga grande, pero estoy generoso...

Se encauza hacia una propuesta con rigor, huyendo de frivolidades. Estupenda interpretación de todos los actores principales, en especial de Jenna Ortega, aunque por encima de ella, Martin Freeman, interpretando a su profesor, hombre intelectual, taciturno y de atractivo despreocupado.

Sus personajes están retratados de manera brillante y certera... con precisión; en una hábil mezcla, hostil y cercana en todos ellos. Acusa cierto desorden, tal vez confusión en el montaje, pero la historia resulta tan potente que pasas por alto esas carencias técnicas.

Pensé que era yo solo, quien consideraba el mal trabajo de Coronado. He visto que alguien confirmaba lo mismo que percibí, en el entorno de las críticas profesionales.

Un guion flojo, mal estructurado, una dirección descompensada, sin asomo de sutileza; los personajes son un despropósito. Alba que se quedó sin piernas con 10 años, no ha conseguido en este tiempo, un mínimo equilibrio psicológico, tal vez le hubiera hecho falta un buen terapeuta.

La policía amiga de Coronado no parecía una policía, no solo por la manera de proceder, sino por su apariencia; su aspecto en el vestir, las formas empleadas.

La he valorado con un generoso 2

Vera Farmiga, se acomoda perfectamente a las necesidades de su personaje. Me sorprendió por la precisa interpretación, superando según mi criterio a G. Clooney.

La historia resulta entretenida, con diálogos brillantes ejecutados con acierto, en una temática conflictiva, pero que distancia de la polémica, al orientarse alejada de la manera esperada. Algunas sub tramas parecen auto gestionadas para dirigir al espectador hacia donde su director desea conducirlos.

Una historia correcta, bien administrada, pero jamás brillante.

Mucha verdad en esta película de Celia Rico Clavellino. Verdad sencilla de entendimientos, proyectados a través de gestos cercanos y elocuentes. Habla de la distancia, la cercanía; esa ausencias de quien ya no está, aunque permanezca presente.

Mantiene una estructura muy teatral, con escenario casi único, pero no resulta agobiante, porque el exterior permanece en todo momento presente a través de los diálogos, e interacciónes de sus personajes.

Cálida, precisa, sobria, discreta, austera.... Encaja en todos esos adjetivos. Magníficamente interpretada por Lola Dueñas y Anna Castilo. Con un presupuesto de 900.000 euros, recaudó alrededor de 140.000 euros en salas. Una lástima que este cine profundo, de calidad, se aleje tanto de los intereses cinematográficos del espectador actual.