Esta semana llevo ya la segunda peli, de errores judiciales y siempre se rompe la cuerda por el lado más débil, en este caso los 4 inocentes que pasaron 15 años en prisión, condenados por unos atentados que no cometieron.

El personaje de Lewis es un chico alocado de principio de los 70, donde su diversión estaba en emborracharse, las drogas y las chicas. En un enfrentamiento en su barrio, se enfrenta al IRA y su padre lo envía a Inglaterra para evitar males mayores. Craso error. Precisamente con el chico allí, se produce un terrible atentado en un pub de militares británicos y mueren varias personas. Con testimonios falsos y a base de utilizar la violencia para sacar confesiones falsas, son juzgados y condenados a cadena perpetua. Lo malo es que también incluyen a su padre, a su tía y a varios primos más. Allí en la cárcel se tomará la vida más en serio, aprovechará para conocer más en profundidad al hombre con el cual ha vivido muchos años, pero del que desconoce muchas cosas, en especial su fuerza de voluntad para afrontar situaciones negativas.

El autor de los hechos confiesa a la policía, pero estos ya han elegido a sus cabezas de turcos y no están dispuestos a admitir la equivocación tan dramática, incluso escondiendo pruebas a la defensa. La primera parte de la peli es un poquitín lenta y en ocasiones aburridas, hasta que entras en materia y pillas la historia en sí, creo que se alargó demasiado hasta la presencia de la abogada, con una actuación sobresaliente a la vez que corta de Emma Thompson. Me hubiese gustado que el desenlace no fuese tan acelerado a partir de la muerte de Giuseppe. Al igual que la sobreactuación de Lewis en su juventud, no me lo creí para nada.

Aún así es una excelente película, donde se magnífican los valores de un hijo por limpiar el nombre de un padre inocente. El rodaje y dirección del juicio final, majestuoso, me ha encantado. Lamentablemente, los sistemas judiciales fallaron, fallan y fallarán en el futuro, para desgracia de la gente inocente.

He disfrutado como un enano con esta película que sorprende al principio por un ritmo lento y confuso, al margen del idioma. Para los que no están acostumbrados a escuchar a argentinos hablar el castellano, les costará un poco pillar el ritmo de las conversaciones.

La ambientación de la doble historia, una la primera que nos habla de una historia en la Argentina de los 70, con sus problemas de politica a nivel interior. Esa tristeza que se respiraba en el ambiente, este triste colorido de los edificios, de los coches, de las calles, un ambiente hostil para los que habitaban en esa época, todo ha quedado magníficamente en pantalla. El interior de las oficinas, cargadas de trabajo, las máquinas de escribir... la olivetti, yo usé mucho una de esas. Donde el colorido de la ropa de la jefa es lo único que vamos a resaltar, junto con la habitación de la chica asesinada, todo lo demás... colores oscuros. Un asesinato, un amor sin corresponder. Veremos como después de 25 años, un hombre retirado y que participo en la investigación de ese caso, desea escribir un libro... acerca de esa misma historia. Con lo cual se pone de acuerdo con la que era su jefa y de la cual estaba enamorado en ese tiempo y nos presentarán dos historias paralelas con flash-backs en el tiempo. Inteligentemente dirigida por Juan José Campanella, nos hará un tour por esos años 70, como se llevaba el proceso de una investigación de asesinato en ese país. Al mismo tiempo, como va in crescendo la historia de amor de los dos personajes principales.

Cuenta con un reparto maravilloso, hasta los secundarios suben el nivel un par de grados más de lo que es habitual. Se mezclan varios géneros dentro del mismo film, comedia, drama, thriller, tensión a raudales es lo que no falllará. Un excelente trabajo de maquillaje en los protagonistas, nos hará creer mucho más en la historia de la cual nos hemos convertido en testigos virtuales.

Lo mejor de todo es que las dos historias tienen un desenlace, lo que no voy a comentar es como terminan ambas, para ello os aconsejo sentaros y disfrutarla como hice yo. No os vais a arrepentir.

Las escenas rodadas en la cancha del Racing de Avellaneda, de lo mejorcito que he visto relacionado con el mundo del fútbol en una pantalla.

Camino a la gloria es una película que entretiene de principio a fin, que no da tregua al espectador y que te cuenta una historia, real, bonita, dura, pero maravillosa, donde no siempre pierde el débil y gana el fuerte. A los amantes del deporte les encantará por supuesto.

Relata la historia real de DON HANSKINS, un original y valiente entrenador que se arriesgó a alinear por primera vez en la liga de baloncesto NCAAA, a un quinteto de chicos negros en su totalidad, algo increible para la época, ya que hablamos de 1966. Venía de haber ganado un campeonato entrenando a un equipo de chicas, y se hizo con los mandos de los TEXAS WESTERN MINERS. Sin apenas unos dólares para fichar, se tuvo que improvisar un equipo sacado de horas y horas mirando jóvenes jugadores por las calles de América. Mezclando un equipo de blancos y negros y paliando a diario con los problemas comunes de ese conflicto racial, pero haciendo ver a los chicos, que el amor al baloncesto está por encima del color de la piel. Muy bien dirigida por James Gartner, se nos presenta a los personajes de forma clara y precisa para que nos vayamos identificando no solo con cada uno de ellos, sino para que conozcamos sus orígenes y lo que les ha costado llegar a esa privilegiada situación.

El reparto lo conforman actores secundarios como Josh Lucas ( VIVEN ), Derek Luke ( ANTWONE FISHER ), Tatyana Ali ( EL PRINCIPE DE BEL-AIR ), Austin Nichols ( WIMBLEDON ), Evan Jones ( JARHEAD ) y un conocidísimo y casi irreconocible gracias al gran equipo de maquillaje John Voight ( CUESTION DE HONOR )

Como curiosidades mencionar que en el reparto se encuentra Schin A.S. Kerr, el cual no es un actor, ni nada por el estilo, simplemente debido a sus conocimientos como jugador de basket, se presentó al casting y fue escogido.

Entre las anécdotas de la historia está que en la fina que se ve en el desenlace de la película, jugó el famosísimo jugador y entrenador de los Lakers PAT RILEY, bajo las órdenes del no menos famoso entrenador Adolph Rupp.

Sin lugar, una gran historia para hacernos ver que cuando la gente quiere y realmente lo desea, el color de la piel, pasa a tener el interés que nunca debió perder, osea... ninguno.

Henry Hathaway se aprovecha de una historia dura y real, para mostrarnos una magnífica película, que pone de manifiesto lo fallido que era el sistema judicial hace casi 80 años, sino que aprovecha para hacernos ver, que mientras exista una posibilidad entre un millón, no se debe perder la esperanza.

Basada en la historia real de Frank Wiecek, el cual fue injustamente encarcelado y condenado a 99 años por un crimen que no cometió, y cuya madre se ha pasado los últimos 11 años fregando escaleras para ahorrar 5000 dólares, si, lo he escrito bien... 5000 dólares de la época, para entregárselos a quien le ayude a demostrar que su hijo es inocente. Este artículo aparecido en un periódico local, despierta el interés de un editor de otro periódico, el cual encomienda la tarea de escribir un artículo sobre el, a un periodista poco favorable a creer en la inocencia del reo. Inteligentemente rodada en forma de documental, analizando paso a paso los pormenores de la investigación llevada a cabo por James Stewart, veremos desde como funciona un interrogatorio policial, una entrevista periodística. Como es la vida en una prisión, hasta pasar la prueba del detector de mentiras, incluso algo curioso, ver como trabaja un periódico y como reciben documentos en un estilo parecido al fax actual. Todo esto bajo un ritmo acorde con la historia. El protagonista, ocupa el lugar de detective que falta en esta historia, y se toma el caso como algo personal, más aún cuando se va acercando a la verdad de la historia.

Corrupción policial, falsos testigos, falsos testimonios, situaciones inverosímiles, todo vale con tal de culpar a un cabeza de turco, que calle las voces de una sociedad cansada de tanto entierro de policías. Se cuenta que asesinaban a uno por día. Stewart está sobresaliente en su papel, creando la tensión suficiente para que el espectador se sienta partícipe de esta historia. Y Richard Conte me ha encantado en su calma aparente sin perder nunca los nervios, sabiendo lo mucho que se jugaba y sus pocas posibilidades.

Sin duda una gran película, que sabe aprovecharse de la historia, del reparto y de unos magníficos exteriores para su éxito.

Antes que nada matizar un detalle, en los primeros 20 minutos del film, pillé tal mosqueo que estuve a punto de mandar la peli a tomar por donde cargan los camiones. Me pareció una tomadura de pelo total, ¿ dónde ha visto el director que esto se considere una peli de acción ? ¡¡¡¡¡ Válgame Dios !!!

Si todo se hace al cachondeo, hasta las muertes son más falsas que un euro de madera, y tienen menos sentimientos que un muñeco de plástico. Le di un poco de margen, a ver si era algo al estilo El Zorro, donde luego se harían las justicieras y todo eso. Pero nada cambió, entonces me dí cuenta de lo que ocurría realmente y comencé a disfrutar de ella. No está encuadrada en el género de acción, sino en la comedia. Ahí si me cuadraba, y reconozco que me he reido mucho más, que con muchas que pululan por las salas de cine con mayor presupuesto y mayor publicidad. Si a esto sumamos que nos alegran la vista dos bellezones como la españolísima Cruz, muy dada siempre a la comedia y lo hace muy bien, por lo menos en mi opinión y a una Salma Hayek, más pija que de costumbre, pero con la misma encargada de vestuario, que se empeña en querer mostrarnos que la chica tiene más pecho del que realmente insinua su figura.

El hecho de que se ruede en muchos exteriores le da un aire más pasable al film, ese aroma de western aunque no sea nada serio, gusta. Me he reido muchísimo también con el fantástico comediante Steve Zahn, qué golpes que tiene, jajaja.

Y una escena a lo matrix en el oeste es lo más reseñable en cuanto a destacar en la dirección, y alguna explosión que otra. No esperéis una peli de oscar, de pensar, o de recordarla después de visionarla, pero os aseguro que no os aburriréis.