Dick Tracy

Gran apuesta personal de Warren Beatty que produce, dirige y protagoniza la película, en la que lo más fascinante es la puesta en escena estilo cómic, con una recreación de la realidad que es una explosión de colores. Esta película es del año 1990, y no recuerdo una película anterior donde se usara esta técnica.

La parte menos lograda es el "maquillaje" de los malos, que los convierte prácticamente en piezas bizarras claramente inhumanas. Entiendo que en los 90 las técnicas digitales aún no se habían desarrollado, pero opino que hubiese sido mejor caricaturizar a los malos que convetirlos en monstruos.

Madonna fue reclutada para hacer de femme fatale en esta película, pero dado que el guión está infantilizado y la película dirigida para el cine familiar, lo más que hace es insinuarse descaradamente. Tendríamos que esperar tres años más para que se desfogase en 'El cuerpo del delito'.

Una atractiva adaptación de cómic que significara un gran éxito de taquilla a comienzos de los noventa, con muchos aciertos desde la faz técnica y con algunos interesantes aportes desde lo meramente artístico.
Entre las virtudes incuestionables se encuentran:
El diseño de arte, una brillante composición de coloridos escenarios que se funden con los carismáticos protagonistas y sus impactantes vestuarios. La ciudad es una postal y una amalgama de paisajes excéntricos, matizados rincones y antros por todos lados y en medio de ello conviven particulares personajes tan repugnantes como encantadores. El contraste de los colores dan por resultado una estética exclusiva y especial que no pasa desapercibida.
El maquillaje es sencillamente espectacular, e incluso es difícil tarea la de identificar a tamaño elenco detrás de tanto makeup.
La actuación de Al Pacino, este actor demuestra nuevamente su versatilidad componiendo un personaje rimbombante que no tiene desperdicio.
Por allí la presencia escénica de Madonna en su papel de mujer fatal no es tan efectiva como sí lo es su encanto en cada musical que aporta al dinámico relato.
La enfática banda sonora de Danny Elfman, que sabe adaptarse perfectamente a los momentos de acción como a los pasajes de romanticismo.
Claro que detrás de tantos aciertos, hay una historia demasiado apocada y castrada en variantes pergeñadas. El relato no llega a tener la suficiente elaboración como para trascender más allá del típico filme de acción resultón que no aporta grandes elementos. Además el tema "Sooner or later" por allí redunda y tarde o temprano cansa de tanto utilizarlo, Warren Beatty no cambia su gesto en todo el filme y Dustin Hoffman compone uno de los peores papeles de su carrera.
En fin, recomendable por toda la parafernalia que adorna el relato, pero que no puede llegar a disimular las carencias narrativas del guión. Sí, por el seductor aspecto visual, no por su enclenque relato.

Al grano, voy directamente con lo bueno y malo de la película, que en este caso en particular se diferencia de forma evidente.

Lo bueno: la ambientación, causa inmediata del estilo visual. Esa estética ¨cómic¨ que se ha construido con acierto. La ciudad, las calles, los interiores, los vestuarios... es un escenario de historietas de las de antes, muy bien realizado.

Lo malo: pues más o menos todo lo demás. El principal problema, que tira por la borda toda la película, es que en ningún momento se lleva el ritmo. Hay mucho lío con los personajes, los marea demasiado, y tanto ir de aquí para allá resulta cansino. Se pierde el interés en la historia con prontitud. Por otra parte, la propia historia no tiene gran atractivo, es demasiado común. A pesar del reparto tampoco hay buenas interpretaciones. El que más sale es Al Pacino y su actuación consiste en hacer el ridículo y abrir mucho los ojos. Y a Madonna se le dan una cantidad ingente de minutos que no aportan nada.

En conclusión, es bastante mala. Se hace difícil prestar atención durante toda la duración. Le falta intensidad, un ritmo firme y mejor narración. Una pena haber desperdiciado ese fantástico estilo artístico y los efectos de maquillaje con tal mediocridad fílmica.

En su momento fui al cine a verla por la mera presencia de Madonna la cual encontré muy seductora con mis ojos de chaval, idolatrándola como lo hacía en aquellos tiempos. Sus canciones son de lo mejor. También el colorido de los escenarios, como sacados de un cómic, a pesar de chocantes, hacían bien su función, pero ya por entonces la trama del film no me convenció del todo.

El año 2023 empieza como terminó el año 2022: viendo a Warren Beatty (casualidades de la vida debido a una sugerencia paterna); si con 'Bugsy' había material para haber sido mucha mejor película de lo que, en mi opinión, en realidad es, en esta que Beatty dirigió un año antes es justo reconocer que da lo que promete, una más que aceptable adaptación de un cómic.

Beatty toma el mando tanto delante como detrás de las cámaras con un personaje hecho a su medida que saca adelante sin demasiados apuros como un detective de policía tan efectivo dentro de su trabajo como algo torpe socialmente fuera de él. Acompañando al protagonista tenemos a nombres de prestigio como Al Pacino (nominado al Oscar como Mejor Actor de Reparto por este papel y la verdad es que se nota que encaja como anillo al guante interpretando al villano principal), William Forsythe, Dustin Hoffman o Mandy Patinkin, todos ellos muy bien caracterizados y, en algunos casos, difíciles de reconocer.

Pero ninguno de ellos tiene el honor de sujetar la película tanto como lo hace la arrebatadora Madonna. La 'ambición rubia' forma parte del triunvirato de personajes soporte del filme junto a Warren Beatty y Al Pacino como la 'femme fatale' de la función, una elección de casting totalmente acertada pues no solo sabe desenvolverse cuando le toca mostrar sus dotes musicales, sino que como actriz tiene escenas en las que eclipsa a todo lo que tiene alrededor (insinuaciones sexuales al margen).

Además del elemento humano que son los actores, 'Dick Tracy' también se sostiene gracias a una ambientación bastante lograda en la que sabe mezclarse el aroma a cómic y el ambiente más opresivo de una ciudad donde el crimen campa a sus anchas y una partitura de Danny Elfman que complementa todo lo demás perfectamente. Sin querer olvidarme del igualmente conseguido vestuario, que también tuvo su nominación al Oscar.

Tengamos claro que esta no es más que una propuesta que propone hacer pasar un buen rato al respetable público, pero si además de conseguir entretener tenemos un reparto de lujo, un aspecto visual imponente y una banda sonora, tanto de Elfman como de la misma Madonna que también aporta sus canciones propias, incluyendo la ganadora al Oscar a Mejor Canción Original 'Sooner or Later (I Always Get My Man)', que seduce al oído tenemos, en definitiva, una película que hace honor al material del que viene.