Tren bala

La carrera cinematográfica de Brad Pitt me merece mucho respeto. Desde su personaje secundario en “Thelma y Louise” que le impulsó hacia un estrellato que ha sabido mantener, hasta su mejor film, “Seven”.
Bien es verdad, que ha sufrido de altibajos, con algunas malas elecciones en cuanto films a interpretar, y una agitada vida personal, que seguramente ha influido de forma negativa en su carrera. Aún así, resulta indudable, de que siempre ha poseído un magnetismo especial, algo difícil de describir, pero que sólo tienen las “estrellas de cine”.
En este film en cuestión, acapara el protagonismo absoluto, siendo el eje principal sobre el cual gira, a ritmo desenfrenado, la historia de acción y puro entretenimiento, salpicada de ingeniosas dosis de humor negro.
La película no es destacable por su guión, cuyo planteamiento nos lo plantea concisamente su director desde un primer momento, un tren, cinco asesinos a sueldo, y un objetivo a conseguir. Al mismo tiempo, hay que reconocer a su director, en otro tiempo “especialista” del mismo Brad Pitt, su ingenio, para mantenernos, al menos distraídos, con tan escueta premisa.
En resumen, un sucedáneo de ese cineasta, a veces genial, como es Tarantino, con la siempre agradecida presencia de Brad Pitt, para sobrevivir a un verano cinéfilo flojo en estrenos, en espera del ansiado otoño.

Bullet train está dirigida por David Leitch, experto en cine de acción, y nos presenta a un Brad Pitt que en esta ocasión interpreta a un recadero que tendrá que hacerse con un maletín. El trabajo parece fácil, pero una serie de circunstancias y casualidades lo meterán en un buen lío. Aquí se encontrará con personajes variopintos y carismáticos como Mandarina y Limón (Aaron Taylor-Johnson y Brian Tyree Henry), a una joven damisela en apuros (Joey King) y a un abuelo y a un hijo que llegan al tren con misterio (Hiroyuki Sanada y Andrew Koji). Si a eso le añadimos a Michael Shannon, a Bad Bunny y una gran dosis de humor negro tintado con enormes escenas de acción, tenemos el cóctel perfecto para pasar una tarde genial.

Y es que Bullet train no solo es un desparrame de escenas de acción coreografiadas, sino que se toma su tiempo para que conozcamos a sus personajes. Tenemos a Brad Pitt buscando el zen mientras Sandra Bullock al oído le canta lo que ha de hacer mientras conversa con Mandarina o Limón antes y después de zurrarse. Sin duda, los personajes de Aaron Taylor-Johnson y Brian Tyree Henry son muy carismáticos, hasta el punto de incluso comerse a Brad Pitt en protagonismo. Las escenas de acción que se intercalan son muy locas, aunque evidentemente hay toques de fantasía en las que el espectador no pensará debido a lo animado del filme, que hace que nos olvidemos del realismo. Es un filme delirante, divertido, con grandes dosis de humor negro y acción que lo hacen perfecto para convertirse en el blockbuster del verano.

En definitiva, BULLET TRAIN es una gran película de acción, que no derrocha en gastos ni tampoco en mobiliario roto, sangre o conversaciones cargadas de humor negro y absurdo. A un servidor le gusta ese tipo de humor, por lo que han acertado en el tono. Sus personajes son variopintos, frikis y carismáticos a más no poder, algo que en una película de acción no suele encontrarse más que en el protagonista. Nunca un tren de Tokio a Kioto había sido tan entretenido. No os la perdáis

Una vez vista, confirmo que esta película ofrece exactamente lo que promete, lo cual es un enorme entretenimiento cimentado en base a una comedia de acción frenética y gamberra. De modo que he salido muy satisfecho del visionado del film, y, de hecho, hasta diría que me ha dejado con ganas de más. Y sí, quiero y espero que haya una secuela, y si es posible, que no tarde mucho en llegar. La trama nos presenta una serie de personajes muy interesantes que, "por azares del destino", acaban juntándose en un tren bala que va hacia Morioka. No dejan de suceder cosas en ningún momento y la diversión está muy, pero que muy presente a lo largo del metraje. Un metraje, por cierto, que sobrepasa las 2 horas de duración, y aun así nunca se hace aburrido ni pesado, lo digo con total y/o plena sinceridad. Las coreografías de los enfrentamientos cuerpo a cuerpo están bien trabajadas. Repito que los personajes son muy interesantes, cada uno podría tener su propia película, ahí lo dejo. Todos ellos son asesinos, y, como ya sabíamos antes de ver la producción, se va a dar un espectáculo de golpes y sangre digno de ver. Los efectos visuales son efectivos y los diálogos también. El reparto cumple con actuaciones convincentes. Aunque Brad Pitt sea el personaje principal, lo cierto es que el protagonismo está bastante repartido durante el filme y eso a mí me gusta (y mucho). Destacables los papeles de Joey King, Aaron Taylor-Johnson y Brian Tyree Henry. Desde luego David Leitch sabe cómo dirigir un producto de estas características, ya lo demostró con Deadpool 2, aunque patinó de forma estrepitosa en el spin-off de Fast & Furious de hace 3 años, algo que me sorprendió. Y es que a excepción de este último trabajo mencionado, me gusta todo cuanto ha realizado porque tiene talento a la hora de ofrecer cine de acción. Tampoco se le da mal el humor negro, pero...los reyes de este subgénero son indudablemente Quentin Tarantino y Guy Ritchie. Así que Bullet Train es un buen divertimento que merece ser visto y disfrutado en una sala de cine. Como anécdota diré que mi padre se lo pasó genial mientras veía conmigo la peli, se rio mucho y disfrutó como un niño.

La crítica va a ser muy corta y concisa , el título lo resume todo, un grupo de asesinos encerrados en un tren por un motivo a determinar.

Mucha acción y muy buena, un desarrollo que te deja pegado a la pantalla, un humor negro abundante y bien realizado ( no he parado de reír, cuando menos te lo esperas, meten un chiste que no te esperas ) con buena historia, buen guion , trama dirección y realización.

Una más que agradable sorpresa ; le he puesto un 7 y no un 10 por dos motivos:

1 - Es muy buena película, pero no es "Snatch. Cerdos y diamantes ".

2 - Spoiler.

Si funciona, no lo cambies.

"A partir de una narrativa no lineal, la película entrelaza varias historias cuyos protagonistas son miembros del crimen organizado de Los Ángeles. Los diálogos estilizados, la mezcla de humor y violencia y su tono irónico distinguen a la película. Su nombre deriva de las revistas de literatura pulp y las novelas gráficas hard boiled, muy populares a mediados del siglo XX, conocidas por su violencia gráfica y su prosa dura".

A los cinco minutos de la película te parece volver a ver al Travolta "Mandarina" y al Samuel L. Jackson "Limón" peleando por el maletín de Marsellus Wallace... hasta con "Flash-Backs".

A la media hora te das cuenta de que la estructura se parece tanto a Kill-Bill, presentando enemigo tras enemigo, que ni te extraña cuando aparecen las katanas en la película.

A partir de los 45 minutos te da igual cómo termine la película mientras la acción no pare.
Es la típica película que ya has visto, pero vuelves a ver porque es entretenida.

Lo malo, la aparición de Sandra Bullock que te recuerda que el tiempo pasa para todos.