Haz click aquí para copiar la URL

Retratos en un mar de mentiras

Drama Tras la muerte de su abuelo en un alúd de lodo, Jairo, un fotógrafo ambulante, y Marina, su prima muda y amnésica, deciden ir a recuperar la tierra de la que fueron desplazados años atrás. Viajan desde Bogotá a la costa colombiana en un viejo y destartalado Renault 4. Durante el viaje Marina comienza a revivir su traumático pasado. (FILMAFFINITY)
<< 1 2
Críticas 10
Críticas ordenadas por utilidad
20 de octubre de 2011
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Independientemente de las connotaciones políticas que este film tiene, hay cosas muy positivas en este drama de denuncia.
La película está bien estructurada y cuenta con una pareja protagonista que raya a buena altura, tanto Julián Román como, especialmente, Paola Baldión ejecutan un gran trabajo que es buena parte de lo mejor con lo que cuenta el film.
Sin dar la espalda a la tradición de realismo mágico del cine y de la literatura hispanoamericanas, se consigue una narración cargada de buenas intenciones y de un cine personal aunque un tanto contaminado por los efectos que el guionista director quiere causar en el espectador. El maniqueísmo de los personajes y la falta de una decisión consciente sobre cuál es la clave de la narración, enturbian los resultados.
Los momentos de road movie son especialmente brillantes aunque se adorna en demasiado en una fotografía que pretende ser un elemento más pero que no se usa adecuadamente porque no existe una interrelación con la historia.
Algunos de los personajes secundarios tampoco tienen especial brillo y molestan porque no se sabe a qué juegan en la historia.
Las últimas escenas de la película son atropelladas y poco afortunadas.
Pero, si no nos centramos en los errores, los personajes principales son creíbles y dotados de la suficiente fuerza para aguantar los problemas de guion.
nudodobleblogspotcom
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3 de marzo de 2012
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Retratos tiene un solo aliciente claro: está hecha para ofrecer pequeñas verdades en detrimento de otras más grandes y tremendas. Es un contrapunto constante entre lo hermoso que se observa y lo nefasto que acontece. Así no es muy difícil percibir su ambigua intención final: Gaviria enaltece sus raíces a base de hermosas panorámicas contrastadas por un derrumbe social que nunca termina de tocar fondo.

Se caen las casas; se derrumban los árboles; los muertos vuelven para atormentarnos y toda la vida colombiana y cafetera se sintetiza en una evidente road movie con protagonistas o bien tímidos, o bien eternamente interesados. La película desnuda miserias pero en el fondo transpira ternura y buena fé. No es esperanzada: es bonachona, casi inocente. Una suerte de "terrible lo que sucede pero...¡que paisajes, que hermosa es mi tierra!". Allí es donde desnuda sus falencias: hay un viaje claro pero el destino del mismo no es muy claro, salvo el de servir como pantallazo social/geográfico. No termina de cuadrar en sus tonos, o exagera las formas hasta tornarlas casi ridículas (el fantasma, la pelea con la prostituta), o se retrotrae a sus contenidas emociones y toma base de la prota para transformar la obra en una constante contemplación que hace catarsis...por dentro, más que por fuera.

Se sostiene por un ritmo acertado que no se desinfla. Lo que se desinfla es el concepto que maneja, pleno de idas y vueltas confusas y producto de una idea que no termina de direccionarse. Retratos parte de una indecisión madre que la torna huidiza, viajera sin rumbo.
Juan Rúas
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
23 de febrero de 2012
Sé el primero en valorar esta crítica
¿Por qué cerrar los ojos? ¿Por qué no mostrar la realidad? Si el cine no sólo esta para embaucar a unos cuantos con efectos especiales, está para abrirnos los ojos a unos cuantos al otro lado del mundo, para acercarnos con retratos de la vida, para hacernos participes del dolor, de la felicidad, de una sonrisa o de una lágrima.

"Retratos de un mar de mentiras" nos transporta a una Colombia llena de dolor, esa que nadie quiere ver, la de los desplazados, oprimidos, pero que están allí. Sin duda alguna es una película que nos hará pensar en los miles de colombianos que día a día conviven con la violencia y que por años han resistido y luchado por seguir adelante.
carlota79
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
10 de junio de 2013
Sé el primero en valorar esta crítica
Lo visto entre ayer y hoy en el cineonfest ejerce de perfecto contraste. Por un lado ayer veía y comentaba la simple y pretenciosa Amen y hoy le toca el turno una sencilla (que no simple) y a la vez pequeña joya escondida como es la que nos ocupa. La cinta nos narra los contrastes de un país desgarrado como Colombia, que como bien nos expone a modo de créditos y según ACNUR, es el segundo país del mundo en número de desplazados por la violencia, viéndose forzados 1 de cada 10 ciudadanos a abandonar su hogar por este motivo. Nos cuenta el relato de cómo Marina (Paola Baldion, que ofrece una gran actuación) junto a su primo (Julián Román, que tampoco lo hace mal) van en busca de unas tierras que pertenecían y pertenecen a su abuelo, ahora fallecido. Conviviendo en un hogar de maltrato y alcoholismo y marcada por un trauma del pasado que su propia mente no le deja recordar, Martina es retraída, por momentos parece cercana al autismo aunque la mayoría cree que está loca.

Una road movie donde el miedo es el factor predominante y la actriz te lo traslada con una simple mirada, empatizando con ella en todo momento. Un país sin ley donde las pocas fuerzas del orden existentes aumentan más esa sensación de desamparo, aparte de luchar con guerrillas, estando los ciudadanos en fuegos cruzados y siendo la violencia parte del día a día de todos. Para mi la mayor cualidad de la cinta es la maestría y la naturalidad con la que nos trasladan unos sucesos que para ellos parecen ser cotidianos (escenas como los militares posando o la gente que pasa del susto a la emoción por estar en su primer tiroteo) pero que personalmente me horrorizan, teniendo escenas desgarradoras como el rato en el hospital o el reencuentro de la protagonista con sus traumas.

No me olvido de su fotografía, del hermoso encuadre que resulta este país, sus preciosos paisajes, su fauna y su flora, que dan un poco de vida y colorido entre tanta muerte y miseria, así como su BSO, con temas que reflejan esa humildad, esa pena y esa mezcla entre acostumbrarse a convivir con ello, resignarse y las ganas de que algún día todo cambie. Películas como esta son el ejemplo claro de cuando una historia sencilla y contada con naturalidad puede convertirse en una cinta notable.

Nota: 7’3
Turbolover1984
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
12 de junio de 2013
Sé el primero en valorar esta crítica
Película interesante, aunque bastante convencional en las formas. No vamos a encontrarnos ni con una historia muy original, ni con una factura impecable, ni con unos personajes increíbles, pero la película funciona. Yo la calificaría como una road movie social, el viaje es un retrato de la Colombia actual (o al menos de la Colombia que se ve al exterior), durante ese viaje vemos la miseria viviendo en las cunetas; la belleza incomparable de unos paisajes impresionantes; la religión casi idólatra; los problemas con la guerrilla y las drogas y la omnipresencia del ejército. Posiblemente los factores que definan el pasado más reciente del país sudamericano. Así que esta parte es para mí, un acierto: sin subrayar innecesariamente, lo muestra todo.
A medida que vamos recorriendo esa carretera, también viajamos en el tiempo, en las vidas marcadas de los dos protagonistas, con un pasado, que tiene que dejar huella.
Al final la película acaba dando un giro dramático, excesivo, casi como unas de esas curvas de la carretera que antes recorrimos. Para mí, ese giro es demasiado brusco, y aunque queda bien resuelto, no dejó de sorprenderme.
En definitiva, una peli interesante, que se deja ver y que nos deja ver la realidad subjetiva de la Colombia del pasado y del presente.
Lo mejor: esa visión social de la realidad a través de un viaje.
Lo peor: el giro dramático; el cartel es spoiler total.
La escena: hay varias, la de árbol que alguien comentaba arriba es brutal; la llegada a las ruinas de la antigua casa; pero me quedo que ese acto casi de psicomagia que es el momento de enterrar la figurita religiosa, una manera poética de exorcizar los demonios.
lughnasad
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow