Torrente 2: Misión en Marbella

Santiago Segura ha encontrado la gallina de los huevos de oro y, nuevamente, lo borda. Este personaje es excepcional, y Segura lo aprovecha a la perfección. El reparto hasta podríamos decir que es mejor que el de la primera entrega ( en esta vuelve a destacar Tony Leblanc, pero aún destaca más Gabino Diego ).
El guión sigue siendo el fundamento de la película, con situaciones absurdas y comentarios jocosos. La aparición del personaje de Gabino Diego es muy oportuna, aunque Torrente sigue siendo la pieza clave del éxito de la película.
Esta película es muy buena, con una calidad parecida a la primera entrega, aunque si tuviera que escoger una me quedo con la primera,ya que fue la aparición en escena del personaje principal: Torrente.

Muy entretenida película, inferior a la primera parte en temática y coherencia, pero superior en cameos y acción. Más chistes, más pivas....... ¡MÁS DE TODO! No se la pierdan.

En esta entrega Segura no necesita presentarnos las características esenciales del personaje Torrente pues ya lo conocemos, es por eso que desde el primer minuto los gags se suceden uno trás otro sin más justificación que entretener y responder a la amoralidad propia del repugnante protagonista. Debo decir que los gags se me hacen muy inspirados y conseguidos, siempre dentro de lo que uno podría esperar de este particular género cinematográfico, amado u odiado por igual. Quería visualizar algo grotesco, absurdo y cínico y lo hallé en el punto máximo de originalidad y creatividad. Torrente 2 goza de un mayor presupuesto que su predecesora y eso se nota, además supuso un punto de inflexión para Segura pues podría haber sepultado el personaje o bien dar inicio a una saga, como sucedió. Quizás esa presión suscitó la calidad media-alta que apreciamos en el film.

La primera peli es sin dudas de culto pero se centra mucho en una trama policíaca cutre, lo que en determinados momentos la torna tediosa. Aquí el hilo argumental auspicia de elemento secundario, es meramente el plafón que le permite a Torrente hacer gala de su dudosa moral en la inmumerable cantidad de situaciones aisladas que contiene el film. Bien por Segura al percatarse de que el atractivo reside las acciones cotidianas de Torrente y no en la resolución de delitos propios de cine Z.

Quienes gusten de los antihéroes grotescos y del humor negro se divertirán con creces.

Después de gastar su dinero en mujeres, alcohol y juego, Torrente (Santiago Segura) decide volver a las andanzas como investigador privado. Con la ayuda de un yonqui llamado Cuco (Gabino Diego), y un perro al que le llaman Franco, abre un destartalado despacho. Lo que no sabe Torrente es que una de las pertenencias que perdió en el casino, un chip del atleti, ha pasado en malas manos y camufla el chip de un detonador de misiles que apuntan a Marbella. Su propietario, Spinelli (José Luis Moreno) quiere una recompensa a cambio de abortar sus malvados planes.

Después del éxito de “Torrente, el Brazo Tonto de la Ley”, Santiago Segura se aseguró de que si preparaba una continuación más le podría reportar y otorgar al casposo “alter ego” que había creado: el ex-policía nacional José Luis Torrente, alcohólico, cocainómano, fascista, machista, putero, fan del Fary y del Atleti de Madrid.

Un personaje así, quijotesco, maloliente pero menos rancio de lo que intenta aparentar, siempre sale en busca de defender unos valores perdidos de la Patria. Aunque a su manera, pero más con risa que humor. La gracia estereotipada de la primera entrega pierde puntos en “Torrente 2” que abandona Madrid para acercarse a Marbella; capital de la especulación inmobiliario, refugio de la “jet set”, y caldo de cultivo, claro está, de los grupúsculos mafiosos más peligrosos.

Con más presupuesto y con el público a su favor, Santiago Segura contó en su segundo largometraje con la colaboración de actores, presentadores y algunos friquis habituales de la televisión; desde la presencia del citado José Luis Moreno, a los veteranos actores Juanito Navarro (como alcalde de Marbella), Tony Leblanc (trajeado de tío mafioso de Torrente) José Luis López Vazquez, Rosa Maria Sardà, Jesús Bonilla, Antonio Resines, las modelos Inés Sastre y Ester Cañadas así como la presencia de Andreu Buenafuente interpretando de nuevo al dominguero y Pepe Navarro como agente de la Interpol.

Otra vez repite Santiago Segura con el mismo personaje que le hizo una estrella, esta vez con mayor despliegue de medios y con más actores.

El producto resulta inferior a la primera parte, no sólo por perder la originalidad del personaje Torrente, también porque la gran oferta de caras conocidas y los mayores gastos de producción no son bien encajados, limitándose a parecer ofrecer más de lo mismo y que se note.

El repetido éxito de taquilla y la fama del personaje hacen su visión obligada.