Si final fantasy tiene el honor de ser la primera película en estar totalmente generada por ordenador, El cristal oscuro lo es por ser la primera película protagonizada únicamente por marionetas, quizá este dato le reste interés al público joven, que quieren pixeles hasta en la sopa, pero los efectos especiales no son lo único que merece ser comentado, también tiene una “suntuosa” banda sonora, eclipsada por la de E.T., que es del mismo año, muy evocadora, es un estilo de música que parece que no volverá a darse en el cine, de esas que le inspiran a uno.

Si bien ni los Misticos ni los Gelflins son muy divertidos, si lo son las intrigas palaciegas de los Skekses, que parecen parodiar las cortes medievales que aparecen en algunos films.
Con un acabado artesanal notable, "un trabajo de chinos" como oí en la radio en su momento, recomendable para los más pequeños y para quien quiera ver cine de fantasía.