Una historia que ya hemos visto demasiadas veces a la que le falta fuerza e intensidad dramatica,  apoyada por la presencia de Margot Robbie (que también es productora) no consigue levantar el vuelo ni siquiera con la tímida historia de amor entre los dos fugitivos que tampoco termina de cuajar.

Estamos en 1935 en un pequeño pueblo de Texas afectado por la Gran Depresión, las tormentas de arena y la sequía. Eugene es un joven que vive en una granja con su madre, su padrastro y su hermanastra. Su vida agoniza y quiere escapar de allí como sea, es cuando descubre en el granero a una ladrona de bancos que esta herida después de un atraco fallido en el que murieron varias personas.  La recompensa que ofrecen es de 10.000 dólares, pero él decide ayudarla...

El protagonista Finn Cole (Peaky Blinders), no desprende carisma ninguno interpretando un papel soso y demasiado aburrido, tampoco el protagonista de "Vikingos" Travis Fimmel que interpreta al padrastro que es jefe de policía consigue atraer la atención. Solamente Margot Robbie despierta interés como esta Bonnie Parker de baratillo.

El guion de Nicolaas Zwart y la direccion de Miles Joris-Peyrafitte no consiguen con un evidente presupuesto limitado hacer un film interesante. Escenas larguísimas y superficiales como la de la ducha, planos que intentar copiar a algunos cineastas consagrados,  falta de acción o un romance fallido quedan en una sencilla película  de entretenimiento.
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