En mi libro de texto de Filosofía de 3º de BUP venia un fotograma de esta película, concretamente ese tan famoso de Alberto Closas en gabardina corriendo hacia el recién atropellado ciclista por esa carretera húmeda y solitaria de la ancha llanura castellana.

Y es que, una de las cosas que más se recuerdan de esta peli es su excepcional fotografía, que recuerda mucho a obras de cine negro americano y a otras, no tan lejanas, de la nouvelle vague.

"Muerte de un ciclista" comienza como una propuesta de cine negro: hay un asesinato (involuntario), una pareja de adúlteros con miedo y un chantajista. Sin embargo, la película comienza a evolucionar poco a poco hacia el drama psicológico, haciendo hincapié en la disyuntiva moral de entregarse a la policía perdiéndolo todo o no hacerlo y cargar con el peso de la culpa.

Excelente el papel de todo el equipo actoral, y un inspiradísimo Carlos Casaravilla clavando el papel de chantajista cínico.

Acertijo en el spoiler.