La ficción televisiva española está en pleno auge, gracias en gran medida a Movistar Plus, y esta serie es la consagración de este hecho, ya que no solo ofrece diversión con un guión inteligente y original, sino que también desprende calidad tanto en su excelente diseño de producción como en las actuaciones de cada uno de sus protagonistas, con estrella internacional incluida. Aunque si tuviéramos que destacar a alguien sin duda sería Inma Cuesta, quien se transforma física y psicológicamente con un personaje antipático que cae realmente bien y que ante todo rebosa fuerza por los cuatro costados.

A lo largo de los ocho capítulos de treinta minutos cada uno que dura esta primera temporada, encontraremos diferentes subtramas que giran en torno a la farsa y a la farándula, moviéndose cómodamente entre el glamour de Hollywood y la España cañí, con cantidades industriales de alcohol y sexo, en una época muy explotada en pantalla, pero que en esta ocasión solo sirve de contexto para contarnos algo no tan visto y sumamente interesante. En definitiva, una serie descarada, con mucho desparpajo pero que sobre todo resulta muy divertida.

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