"Decoy" es una de esas películas difíciles de encontrar, un pulp noir (por momentos parece una versión noir de "Frankenstein") de bajo presupuesto y firmado por un director desconocido. Hay que reconocer que la trama es bastante descabellada en muchos puntos, y algunas actuaciones son un tanto chocantes. Y la producción es de las más ajustadas que se pueden tener. Pero su punto fuerte es Jean Gillie en el papel de Margot Shelby, la femme fatale más fatale y más tremebunda de la historia, Lady Macbeth del noir, que es lo que salva a la película y la lleva al nivel de culto. Tiene varios momentos antológicos, incluyendo la última escena con Jo Jo. Ni gota de melodrama, ni un respiro, nada de azúcar. Negra como el as de picas. Creo que sin ella la película habría quedado totalmente olvidada, pero así son las cosas a veces. Por desgracia, Jean Gillie murió muy poco tiempo después. ¿Quién sabe que hubiera podido pasar?