Parece que la animación digital ha sido capaz de derribar uno de los grandes tópicos del séptimo arte. Si bien hay excepciones, las secuelas de las películas de animación digital siempre tienen un nivel enorme, y en muchos casos hasta superior al original. Por ejemplo, Gru 2 me pareció bastante mejor que la primera, y no es algo que me haya pasado puntualmente en el género.

´Porque tiene especial mérito pillar una buena película y conseguir un guión y argumento lo suficientemente atractivos como para no echar de menos la anterior. Gru 2 consigue sorprender a pesar de que no significa una revolución. Siguen estando los minions, sigue teniendo ese toque de humor negro a pesar de no tener a nuestro villano favorito y, lo más importante para una secuela, los añadidos son bastante buenos. Lucy, la protagonista femenina de esta película, supone la principal novedad, y es lo suficientemente encantadora y carismática como para no ser uno de esos personajes que estropean el universo. Suena a tontería, pero es algo que ocurre demasiadas veces.

Gru 2 es una muy buena película, que me hace pensar lo difícil que es que Gru 3 mantenga el nivel. Claro, eso pensaba de la secuela hasta que la vi.