Un matrimonio tiene serios problemas hasta el punto de odiarse, intentan arreglar su matrimonio pero hay viejos y nuevos resentimientos entre ellos, y conflictos que requieren de bastante comunicación entre ambos, pero lo que menos intentan es comunicarse. Al mismo tiempo su único hijo ha sido enviado a una escuela militarizada donde no se le ocurre nada mejor que dedicarse a chantajear a sus superiores, y hay un ladrón rubio que por una serie de circunstancias termina tomando como rehén a esta odiosa pareja, pero por ABC motivos –que sinceramente no recuerdo muy bien- tiene que fingir que no es un secuestrador sino el consejero matrimonial asiático –siendo el ladrón rubio- y tratar de que los invitados a la cena no sospechen nada.

Simpática comedia con algo de humor negro y mucho de amargura y análisis de cuán difícil puede ser estar casado y no llevarte bien con la familia de tu esposa, algo de amargura hay en la historia pero siempre hay un toque optimista con el cual terminar la noche, muy recomendable.