Como bien dice el título, no lo soy. Los primeros cómics que leí, aunque no los mejores, fueron los de Spiderman... así que le tengo un cariño especial a este personaje; de todos modos, ¿es eso realmente importante? Quizá sí para los usuarios que estén leyendo esta crítica, pero a mí me beneficia. "¿Y en qué le beneficia?", pueden estar pensando. Pues bien, muchos dicen que es una película con un resultado de lo más nefasto... Y yo la disfruté, tal vez por mi aprecio a Spiderman.

No voy a mentir, tiene sus defectillos. Los actores -excepto el protagonista y sus tíos, los cuales me resultaron muy simpáticos- no destacan demasiado y el villano... Bueno, hablemos de él. Tenemos como antagonista al doctor Connors, personaje que no me desagrada especialmente, convertido en un monstruoso reptil con el objetivo de [spoiler*]. Ahá, todo muy bien, claro... Pero es que ese villano no tiene carisma. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el antihéroe con más carisma que aparece en el mundillo del hombre araña es "Octopus" (y no me mencionen al Duende verde, hagan el favor).
Conclusión: Si hubieran elegido a Octopus para esta película habríamos visto más de lo mismo y sólo habría faltado Tobey Maguire para acabarlo de arreglar.

En general es entretenida, para pasar un buen rato. Con sus subidas y bajadas en cuanto a calidad se refiere, pero muy aceptable.

Un saludo,
Myriam R. Nudd.
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