Con este drama, que presenta a un boxeador de tercera fila enfrentándose al campeón de los pesos pesados, alcanzó Stallone una fama mundial que lo acabó encumbrando. Luego vendrían las películas de acción (en las que supo explotar sus vigorosos músculos y su inexpresiva cara) y algún fallido intento en el género cómico.

El guión de la pelicula fue escrito por el propio Stallone y se basa en el combate que enfrentó al campeón Muhammad Alí (quien venía de arrebatarle la corona a George Foreman) contra el desconocido y mediocre Chuck Wepner; Hepner inspiró a Stallone, tras enviar a la lona a Ali (cosa que nunca nadie había logrado antes) y quedar muy cerca de la gloria (la pelea la perdió Hepner, por KO, cuando sólo faltaban 19 segundos para finalizar el 15º y último round... y haber aguantado todo el combate al campeón habría sido una auténtica hazaña).

Las actuaciones de los actores son convincentes, en términos generales, y la triste historia de un perdedor al que se le ofrece una segunda oportunidad logra conmover al espectador (en algunos momentos). La banda sonora, compuesta por Bill Conti, hace que las pulsaciones de quien ve la película se aceleren tanto como las zancadas del protagonista del film.... cuando comienza su severo entrenamiento.