Average rating
4.3
Ratings
1,442
Reviews
1,442
Lists
2
Movie recommendations
- Ratings by category
- Contact
- Social Networks
-
Share his/her profile
Talía666 rating:
9
![](https://filmaffinity.com/images/myratings/9.png)
7.2
3,857
Drama
This films tells the true story of seven teenagers who agitated for reduced student bus fares under two different regimes in Argentina, with tragic results. At first succeeding under the government of Isabel Peron, their protests draw hostile attention from the military regime that overthrows Peron. The ensuing crackdown on student social activists is demonstrated when police break up a school dance wielding swords on horseback. Later, ... [+]
Language of the review:
- es
May 24, 2013
24 of 29 users found this review helpful
Por Claudio de Acha, asesinado por ser joven y pedir un boleto estudiantil.
Por Horacio Ungaro, casi un niño que se enfrentó a una panda de psicópatas
Por María Clara Ciocchini, que soñaba con un mundo mejor que nunca podrá ver.
Por Claudia Falcone, repetidamente violada por todos los agujeros de su cuerpo.
Por Francisco López Muntaner, 17 años y un montón de sueños perdidos.
Por Daniel A. Racero, por lo que sus ojos vieron y nunca debieron haber visto.
Por Pablo Díaz, el único que consiguió sobrevivir para contar la historia de todos.
Por sus padres, por sus hermanos, por todos aquéllos que aún siguen buscándolos.
Y por los hijos que no tuvieron y las vidas que no vivieron. Gracias, Héctor Olivera
Por Horacio Ungaro, casi un niño que se enfrentó a una panda de psicópatas
Por María Clara Ciocchini, que soñaba con un mundo mejor que nunca podrá ver.
Por Claudia Falcone, repetidamente violada por todos los agujeros de su cuerpo.
Por Francisco López Muntaner, 17 años y un montón de sueños perdidos.
Por Daniel A. Racero, por lo que sus ojos vieron y nunca debieron haber visto.
Por Pablo Díaz, el único que consiguió sobrevivir para contar la historia de todos.
Por sus padres, por sus hermanos, por todos aquéllos que aún siguen buscándolos.
Y por los hijos que no tuvieron y las vidas que no vivieron. Gracias, Héctor Olivera