Gran película, para ser la primera de animación que no salía del seno de las industrias Disney. Tiene una imagen, desarrollo y sobretodo unas canciones fantásticas y que son perfectamente equiparables a las películas Disney de los 90 (década de esta película). En ella podemos observar como Moisés, al principio el acomodado hijo adoptivo del faraón de Egipto, deja toda su vida de riquezas y todos los proyectos que tenía junto al heredero, su hermano Ramsés, al descubrir sus verdaderos orígenes. Al irse con su pueblo habla con Dios y se enemista con su hermano por la liberación de dicho pueblo, tal como dicen las historias bíblicas. En lineas generales este es su argumento, muy bien cuidado con los protagonistas bien diferenciados.
Lo dicho, aunque no seáis religiosos la recomiendo, no tiene nada que envidiar a Disney.