Cuanto todo el mundo la clasifica de obra maestra sin duda lo será. Pero es de ese tipo que requiere un esfuerzo extraordinario del espectador para apreciar la calidad del mensaje. Todo es bello pero el mensaje está encriptado.
Una especie de culteranismo que requiere de gran formación previa, y aún así sigue encriptado. Pues aún con la formación no es suficiente. No sólo requiere excelente formación general sino también específica, para la propia película. Por consiguiente tanto puede gustarte como aburrirte, o resulta una masa informe, aunque bella, de una sucesión de escenas que no alcanzan a contar una historia en sí misma.
El grandioso arte que retrata la película, escritores como Dostoyevski, Chejov o La Divina Comedia (cuando dice: "A la mitad de mi vida me encontré en un oscuro bosque", pintores como Da Vinci explícitamente o implícitamente como Johannes Vermeer, o la música de Bach, tienen un arte que siendo excelso es mucho más perceptible que esta obra, y por ello son inmortales y universales, a diferencia de la película.
¿Aparte de los españoles quién conoce el drama de los niños que fueron enviados a Rusia en la Guerra Civil?
Siendo escenas extraordinarias el conjunto no suma. Aunque esa falta de suma a buen seguro es falta de preparación mía para verla, pero es que para ser una obra maestra universal tampoco debería hacer falta esa específica preparación.
En general se trata de un problema del cine eslavo, pero que no tienen otros géneros artísticos de esa cultura.
Y por último, espectacular interpretación y belleza de la protagonista.