William Blake ha decidido abandonar Cleveland (Ohio), tras recibir una oferta de trabajo en Machine, una incómoda y salvaje ciudad en el Oeste de los EE. UU., pero cuando llega su puesto lo ocupa otra persona. En un lande amoroso Charlie Dickinson, el hijo del jefe de la empresa, mata a su novia cuando la encuentra en la cama con Blake. Y este se carga a Charlie.

Es de esta manera como un simplón contable con nombre y apellido de poeta se convierte en un "fugitivo" perseguido por una cohorte de policías y cazarrecompensas.

Jim Jarmusch consigue crear una magnífica sin paliativos película, con un gran prólogo y un sensacional actor como es Johny Depp (joven). Con genial guion del propio Jarmusch, el filme es, a la vez que un cuasi documental del lejano oeste, un western disparatado e intenso.

Además de Depp, en el reparto destaco a Gary Farmer como el indio que acompaña al fugado y la breve pero sustanciosa presencia de Robert Mitchum, junto a otros como Lance Henriksen, Michael Wincott y Crispin Glover.

Genial la banda sonora vibrante música de Neil Youg, junto a una maravillosa fotografía Robby Müller (B&W), nítida y toda una obra de arte captando paisajes y bosques de una extraordinaria grandiosidad.

No recuerdo un Western como este, y aunque por momentos parece bajar en su ritmo narrativo, estamos ante una película notable y original.