El regalo es un thriller con sabor a añejo,con sabor a esas películas antiguas en la que no sabías nada, en las que pensabas una cosa y sucedía otra, en la que en algunos instantes despista al espectador creando una atmosfera oscura, tetrica y que más que de misterio, tiene esencia a película de terror con final no feliz.

Joel Edgerton al cual aplaudo y me pongo en pie ante él, por haber no solo haberse atrevido a dirigir sino también, haber hecho el guión y protagonizado, tres trabajos que me encantaría poder ver en más ocasiones, porque con películas como estas te das cuenta de que hay actores que si se les da una oportunidad como esta, dejan a la altura del betún a muchos directores con más experiencia que ellos.

El señor Edgerton, no solo sabe hacer tres cosas a la vez, también sabe elegir al reparto perfecto, una actriz con un potencial enorme como es Rebecca Hall y que en la mayoría de los minutos que dura El regalo nos regala escenas escalofriantes, que las vive como si de verdad la estuviesen sucediendo y esa sensación la transmite al espectador.

Hablemos ahora de Jason Bateman esa oscuridad que desprende en contraposición con la de su mujer, me dejo anonadada en más de una ocasión.
Todos nos hemos encontrado con una persona como él en nuestras vidas, capaz de hacer cualquier cosa por triunfar o ser popular sin medir las consecuencias y ahí es cuando entra el pasado, como un elemento inanimado, como un personaje muy importante pero sin voz.

A mí me ha dejado perpleja, sobre todo por ese brillante final, jamás pensé que "El regalo" terminase de esa manera.
Felicidades Joel, extrañaba una producción de estas características.