Esa es la principal esencia que le saco yo a la película. Tres señoras, tres status, tres personalidades. Y un vaivén de cambios y pensamientos.

Estamos en un contexto que oscila en torno a la reina Ana, cogiendo detalles fieles a su existencia y jugando con algunos otros de dudosa veracidad. En una ambientación de la época fidedigna, pero que a mi personalmente no me ha metido en contexto. Hay películas modernas que plasmas a la perfección otra época, pero en esta en ningún momento me he sentido acorde a la época (opinión personal)

Tres mujeres:

La Reina Ana, que hace un papel genial, con sus cambios bruscos de personalidad, su progresiva enfermedad y sus excentricidades.

Sarah, condesa de Malborought y amiga de la reina. Una mujer fría, sarcástica y con bastante seguridad en sí misma.

Y Abigail, prima de Sarah, señora venida a menos que busca una mejor forma de vida.

Hasta aquí el quienes, el quienes parte 1, porque la gracia y el encanto de la película reside en el quienes parte 2. Un juego mental que guisa ingredientes de todo tipo, amor, amistad, traiciones, ambiciones, sorpresas, encerronas... una transformación radical, que finaliza libre a interpretaciones. Aunque yo personalmente lo veo claro a mi manera, y no veo trasfondo ni sorpresa.

La película, por finalizar, genial en cuanto a actuaciones y organizada de un modo bastante peculiar pero acertado, que reaviva el interés, por capítulos. Porque verla de una sentada hubiera sido más pesado, aún.