Que "Brave" es una película con cierta amenidad y con una factura técnica impecable no se puede negar. Pero que sea una impresionante obra estandarte de Pixar... sí se puede negar.

Es curioso como en el año 2012 Disney Animation fue el estudio que logró su fantástico "Toy Story" del año con "¡Rompe Ralph!", mientras que Pixar optaba por un "Enredados" o un "Tiana y el sapo" demasiado visto y huero.

El film nos narra las desventuras de una princesa medieval que se rebela ante su destino y los deseos de su madre de convertirse en "esposa de" (esposa de algún príncipe tontorrón). Es una premisa robusta, desde luego, pero original... lo que se dice original... a estas alturas no lo es. Disney ya nos regaló heroínas femeninas rebeladas y dueñas de su vida... la gran película de Disney sobre este tema es "Mulan" (una cinta con más humor, emoción, intensidad e intriga que la que nos ocupa), pero mismamente en los últimos años hemos tenido a "Enredados" y a "Tiana y el sapo" que, al igual que esta cinta, sin ser memorables son una digna distracción.

Pues bien. "Brave" se queda en el pasatiempo simplón (e incluso en aburrimiento en su segunda mitad si se es adulto) sin llegar nunca a las cotas de emoción, ternura, trascendencia o hilaridad a las que Pixar nos tiene acostumbrados. Y es que tras habernos regalado pedazo de películas como la trilogía de "Toy Story", "Los increíbles", "Monstruos S.A.", "Wall.E", "Up" o "Buscando a Nemo" es inevitable rememorar aquellos placeres mientras se visiona este metraje. Decir que "Brave" es, junto a las cintas de "Cars", lo peor de Pixar es triste... pero es que desgraciadamente es así.

La cinta tiene un comienzo de lo más potente y prometedor (básicamente gracias a la definición y el colorido de su animación, al entrañable diseño de algunos personajes y a un tema musical), pero pasados sus primeros 30 minutos la cita no para de descender hacia la rutina infantil de cualquier otra cinta animada. En "Brave" no encontraremos humor desvergonzado y valiente (sus previsibles gracias solo me levantaron la sonrisa... tal vez la bruja sí logró captar algo de divertida atención en mí), las situaciones de los personajes y sus decisiones no sorprenderán en absoluto. La cinta se va desarrollando de manera desanimada, candorosa, cándida, redundante y algo vulgar. La banda sonora por su parte es correcta pero no se hace ni mucho menos inolvidable.

En fin, "Brave" es una cinta infantil, que de nuevo resulta útil para educar a los críos en la igualdad de género. Pero un adulto al que le gusten las cintas familiares de Pixar se va a sentir muy decepcionado... e incluso estará al borde del sueño en su último tercio por la previsibilidad de todo, su superficialidad y su falta de chispa. Dentro del conjunto destaca la animación que hace de sus personajes algo "mono" (pero nunca entrañable y tierno, ya que falta más construcción en su guión). Cuando veo "Brave" solo puedo evocar obras mejores, y me pongo a imaginar al abuelito Carl Fredicksen, a Dori, a Sully, a Edna Moda, al Señor Patata... o mismamente a las criaturillas de "¡Rompe Ralph!" (a Félix, a la sargento Calhoun, a Vanellope) y pienso... ¡¡ASÍ ES COMO SE HACE!!

Lo mejor: Su animación. El tema de Russian Red. Sus primero 30 minutos.
Lo peor: Que sea de Pixar y sea tan rutinaria e ingenua.