Mayans M.C. no es una mala serie. Ni mucho menos.
Tiene ese aire que tenía Sons of Anarchy, el estilo tan característico de ficción criminal de Kurt Sutter. Es decir, el que la vea con el objetivo de seguir en ese universo de SAMCRO, enhorabuena. Todo sigue intacto en Mayans. Además, la serie se deja ver muy bien y es interesante y entretenida en su descripción de las acciones criminales del club motorista latino. Sin embargo, es verdad que la trama no es ni de lejos tan interesante, y que personajes como Jax, Gemma o Tara tienen difícil relevo. Al igual que en SoA, lo mejor de Mayans son las relaciones personales entre los personajes, y ahí reina de forma absoluta la excelsa Sarah Bolger, que añade otro personaje increíble a su carrera. Los mejores momentos de la serie la tienen a ella en pantalla (ver la discusión+ sexo entre Miguel y Emily acerca de su hijo), sola o con J.D. Pardo o Danny Pino a su lado. Su triángulo amoroso es lo más interesante de una serie algo desaprovechada, pero aun así interesante.

Lo mejor: El estilo Sutter, muy presente, y la brillantez de Sarah Bolger como actriz.
Lo peor: El interés es demasiado variable, y no emociona demasiado.