Normalmente, las películas que tienen como tema principal un mundo distópico han sido bien recibidas por la audiencia, seguro a la mayorías les ha de gustar eso; sin embargo en ésta ocasión nos encontramos con un caso en el cuál eso se omite estrepitosamente.

James DeMonaco, persona que se encargó aparentemente de que esto saliera a la luz, nos trae una historia que si bien no es muy novedosa, es aceptable y hasta cierto punto considerada un regocijo; hasta aquí todo bien, pero en ese caso ¿Cuál carajos se supone que es la horrenda, pavorosa, indeseable, calamitosa y arcaica situación que coloca a esta película como floja? Es simple, pero algo extenso:

En primer lugar, y como punto sosegado, he de decir que su duración es muy, MUY pequeña, a tal punto de considerarse casi casi como la duración de un documental con poco presupuesto, teniendo una idea tan interesante, no puedo creer que no la hayan explotado del todo bien y se hayan quedado satisfechos con algo así. Ésto fácilmente podría ser perdonable si el producto es de calidad o al menos tiene cierta valía, pero desafortunadamente tampoco cumple con eso.

En segundo lugar queda precisamente la calidad de la película como tal...... mmmmm bueno; aquí hay muchas cosas que debatir, para empezar, no se cómo es que consiguieron un reparto tan endeble y apático, parece que todos los actores tuvieran un rezago y no les interesara mucho lo que hacen, además; si bien hacen un buen manejo del suspenso, éste sentimiento desaparece cuando se meten en esos embrollos dramáticos que ya anteriormente hemos visto hasta el cansancio y que aún así los guionistas se toman la molestia de presentar.

La historia se puede tornar predecible y monótona y en cierto punto aburrida, digo no soy guionista ni mucho menos pero, ¿teniendo algo tan grande por donde desarrollar por qué forzosamente se reducen a una zona residencial? No lo he llegado a comprender del todo pero bueno, lo que si se me hizo sangrante fue esa estúpida forma de mostrar la historia: una familia de acaudalados que se está preparando para el festín sangriento de esa noche es de repente alterada por un detalle que a mi me disgustó completamente, que es precisamente el hijo menor de la familia; seamos realistas y sinceros ¿a quién le gustó realmente su papel? Aún no llego a entender cómo pudo ser posible algo así, pero lo podemos ver del siguiente modo: Si el hijo hubiese tenido más atención por sus padres y no se hubiera hecho un energúmeno social con un cabello que no le queda ni a su hermana en la película no se le hubiera pasado por la cabeza haber hecho semejante ocurrencia en una noche como esa, pero además, haber tenido los suficientes pantalones como para haberse enfrentado a sus padres con algo tan grave y además, seguir actuando de una manera despreciable en toda la película dándonos a entender que si no hubiera sido por su simpatía no se hubiera suscitado nada de lo acontecido 35 minutos después de haber empezado la película, esa es una falacia que no se podría perdonar fácilmente, ya que, fácilmente el guión no tiene tanta pizca de inteligencia; en lo personal inclusive en la sociedad más afectada políticamente con un sistema totalitario no pasaría algo como eso, o por lo menos no sé que clase de persona en su sano juicio haría lo que este chaval hizo, en fin, creo que es lo más enfermizo y ridículo de la película.

Recomendable para cualquier público al que disfrute de ver películas de suspenso y derivados, aunque sólo por una vez, verla la segunda vez pienso que nos provocaría un pequeño discurso, aunque por supuesto tampoco es que nos quite tanto tiempo, después de todo dura menos de 90 minutos, los suficientes para una película ligeramente mediocre...