Primeras elecciones de la democracia en 1977. Un grupo de jóvenes urbanitas que preparan la campaña del PSOE en Burgos, deciden peinar toda la zona rural de la montaña, en busca de votantes entre los campesinos de pueblos aislados e ignorantes.
Llenos de ilusión y suficiencia, estos progresistas muchachos, preparan los discursos con los que pretenden encandilar a los " paletos". Reformas agrarias, mejoras de pensiones, seguridad social etc...Vámos, ofrecerles los caramelos con los que creen ganarse los votos de esos " analfabetos.
Pero en el primer pueblo que recalan, se encuentran con que sólo viven tres personas, el alcalde ( Paco Rabal), su mujer, y un vecino con el que no se hablan.
A pesar de todo, tratan de ganar el voto del señor Cayo ofreciéndole servicios, pero éste es quien les ofrecerá servicios que los urbanitas no podrán olvidar.
Interesante drama, adaptado de una novela de Miguel Delibes, con un sólido guión y con otra memorable interpretación de Paco Rabal.
Lo cierto es que la película se sostiene gracias a estos dos elementos ya que, en cuanto a los demás personajes, no aportan nada, o muy poco, al conjunto. Pero la historia, provoca reflexiones muy interesantes sobre la incipiente democracia, las necesidades de la vida rural frente a las de la ciudad y la sabiduría de los " paletos" tan olvidados y abandonados por el resto del mundo.