La película se deja ver bastante bien. Pero si eres anti-USA, opinarás como el resto de los comentaristas, dejando de lado la objetividad. Ver juntos a actores íconos de los 80 es impagable. La historia es simple y algunas escenas un tanto exageradas e irrisorias; pero desmerecerla sólo porque es patriotera es un error, lo que me recuerda a quienes denostan a Elia Kazan por conductas extra artísticas. Me queda claro que no se criticaría tanto esta película si en vez de cubanos y soviéticos se tratara de nazis; es decir, hay que ser más serios a la hora de comentar. Recomendable 100% para los nostálgicos y quienes deseen pasar un buen rato sin resentimientos de por medio.