Es increíble lo que puede hacer bastante marketing para salvaguardar la filmografía de un director. Dentro de unos años, se recordará "death proof" como una de las peores películas de un afamado director, el Tarantino éste, más conocido por sus diálogos locos y extraños, pero bien resueltos e inteligentes en ocasiones, que por sus buenas realizaciones. En esta película, siendo sincero y objetivo, un grupo de muchachas en cada una de las partes del filme, discuten sobre sus vacaciones, lo mal que les queda el pelo y el número de tíos que se han tirado. Vamos, como "Al salir de clase", pero con muchísimo más presupuesto y con tías más feas (ya le gustaría a Quentin haber tenido a Elsa Pataky en este filme). Una escena final espectacular, con un desenlace flojísimo, más bien, ñoño y absurdo, intentan justificar 2 horas de aburrimiento y pesadez. Pues no, por mucho dinero que tengas y aunque tu ego esté por las nubes, tu película es una mierda Tarantino, por mucho que tus incondicionables te chupen el culo. Es el fin de la era Tarantino. Tiempo al tiempo.