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TOM REGAN rating:
5
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Drama
Cassandra’s Dream is the story of two brothers, their problems (blind ambition and compulsive gambling), their family, their women, their romance, passion and their chasing of dreams which end in terrible tragedy. It is a movie of the same type as Match Point set in contemporary London and it’s environs and full of suspense and tension. In this case the brothers are working class and brilliantly acted by Ewan McGregor and Colin Farrell. ... [+]
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- es
March 22, 2019
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46/10(20/03/19) Fallida cinta del otrora genial Woody Allen, en un relato que se auto-plagia, tratando de modo simplista temas recurrentes en el director y guionista, como son los sentimientos de culpa tras un crimen, algo muy de Dostoievski, tratado ya en la buenísima “Delitos y faltas” (1989), y más recientemente en la estimable “Match Point” (2005), donde el cineasta neoyorkino vuelca su pesimismo con la naturaleza humana. Un drama donde Woody extirpa cualquier tono de humor, cuando es su mayor Don, ello en una historia de protagonistas codiciosos, arrogantes, pretenciosos, donde se radiografía a dos hermanos y sus anhelos, que se parece mucho a la brillante última realización del maestro Sidney Lumet, “Antes que el diablo sepa que has muerto”. Pero Allen se apoya aquí en un guión muy pobre, poco creíble, con lagunas que la hace zozobrar, con diálogos forzados y poco naturales, con un increscendo dramático flojo, para culminar en un final abrupto e insatisfactorio. El director gafotas se pone aquí moralista analizando, juzgando y sentenciando el Mal, ello con ramalazos sobre la muerte, la religión, y el sexo, pero todo evolucionado de forma ramplona, a machetazos donde nada fluye orgánicamente, y todo huele a imposición del guión. Esta es la primera película de Woody Allen, desde “Todo lo que siempre quiso saber sobre el sexo…” (1972), en que utiliza una partitura musical original y ajena a Woody Allen, en este caso una notable creación de Philip Glass.
El título hace referencia cultural a una de las obsesiones allenianas, como es la tragedia griega (ya parodiada en “Poderosa Afrodita”), en este caso hace referencia física al nombre de un velero que se compran los protagonistas, pero que sirve de alegoría tangencial a la narración: Casandra, hija de los reyes de Troya, hizo un pacto con el dios Apolo, ella se acostaba con él y él le concedía el Don de la profecía. Sin embargo Casandra, como muchas mujeres, prometió pero no cumplió, una vez consiguió convertirse en adivina, se negó a acostarse con Apolo. Así que éste, embravecido y adolorido, como todo hombre que queda iniciado, le escupió y la maldijo. Ella sería capaz de ver el futuro pero estaría condenada a que nadie le creyera. Por eso, aunque lo anticipó y previno a sus conciudadanos acerca de la invasión, nadie le hizo caso y Troya fue destruida a manos de los griegos; Con lo que con el título Allen cubre con un halo fatalista la película, nos antecede que probablemente nada saldrá bien, e incluso se habla en diferentes momentos del sueño como pesadillas o como falta de este, además cuenta algo que ha hecho pero su mujer lo toma por demente (como Casandra).
Tiene un inicio atractivo, con una narrativa ágil y sustanciosa nos presentan a los protagonistas y sus personalidades antagónicas, uno un ludópata y el otro un pretencioso, les une un barco y sus ansias de dinero, nos hablan cual Mesías del tío americano (algo muy manido), los vemos en ambiente familiar oyendo de su madre el mantra que recorre epidérmicamente el film: “Con lo único que contamos en los momentos difíciles es la familia”.
Allen pretende hacernos sentir en dilemas morales, asimismo explora la desesperación en que uno puede verse imbuido por una espiral que no pueda parar, y en esta caída al vacío cruzar una línea sin retorno, pero esto es relatado a cámara lenta, se ven las costuras deshilacharse por todos lados, no te crees la desesperación de estos hermanos, no ves los motivos para que se planteen ser unos asesinos, no te crees que este ricachón deposite sus esperanzas de librarse de prisión en estos dos advenedizos, que pueden fallar en mil detalles, que pueden relacionarlos con su tío, o que alguien que se sabe enemigo del tío, se relacione con ellos como si nada. También resulta un pegote lo de que Ian tenga negocios hoteleros en california, pero si es un “pelagatos”! Como va a llevar negocios a miles de km de distancia! Con el nivel monetario que se le ve cómo vamos a creernos que tiene participaciones en hostelería en USA (puaj!)?
La pareja (de hermanos) protagonista resulta poco empática, tan pobre como escasa en hondura dramática, meros clichés con patas, que terminan por darnos igual lo que les pase. Hablan de modo inverosímil para ser dos tipos sin aparentes estudios, un mecánico y un… y es que no se sabe en que ayuda al padre en el restaurante (es cocinero, camarero, maître, pinche?), pero tenemos que ver natural su modo de expresarse filosófico, frases: "Es curioso cómo la vida se reduce a esto"; "La vida no es nada si no es totalmente irónica"; " Toda la vida humana tiene que ver con la violencia"; "Es gracioso cómo la vida tiene vida propia"; chirrían en sus bocas más que un extraterrestre en “El padrino”; para al final acabar en ua conclusión débil y sin capacidad de emocionarte mínimante al verla venir de lejos.
El título hace referencia cultural a una de las obsesiones allenianas, como es la tragedia griega (ya parodiada en “Poderosa Afrodita”), en este caso hace referencia física al nombre de un velero que se compran los protagonistas, pero que sirve de alegoría tangencial a la narración: Casandra, hija de los reyes de Troya, hizo un pacto con el dios Apolo, ella se acostaba con él y él le concedía el Don de la profecía. Sin embargo Casandra, como muchas mujeres, prometió pero no cumplió, una vez consiguió convertirse en adivina, se negó a acostarse con Apolo. Así que éste, embravecido y adolorido, como todo hombre que queda iniciado, le escupió y la maldijo. Ella sería capaz de ver el futuro pero estaría condenada a que nadie le creyera. Por eso, aunque lo anticipó y previno a sus conciudadanos acerca de la invasión, nadie le hizo caso y Troya fue destruida a manos de los griegos; Con lo que con el título Allen cubre con un halo fatalista la película, nos antecede que probablemente nada saldrá bien, e incluso se habla en diferentes momentos del sueño como pesadillas o como falta de este, además cuenta algo que ha hecho pero su mujer lo toma por demente (como Casandra).
Tiene un inicio atractivo, con una narrativa ágil y sustanciosa nos presentan a los protagonistas y sus personalidades antagónicas, uno un ludópata y el otro un pretencioso, les une un barco y sus ansias de dinero, nos hablan cual Mesías del tío americano (algo muy manido), los vemos en ambiente familiar oyendo de su madre el mantra que recorre epidérmicamente el film: “Con lo único que contamos en los momentos difíciles es la familia”.
Allen pretende hacernos sentir en dilemas morales, asimismo explora la desesperación en que uno puede verse imbuido por una espiral que no pueda parar, y en esta caída al vacío cruzar una línea sin retorno, pero esto es relatado a cámara lenta, se ven las costuras deshilacharse por todos lados, no te crees la desesperación de estos hermanos, no ves los motivos para que se planteen ser unos asesinos, no te crees que este ricachón deposite sus esperanzas de librarse de prisión en estos dos advenedizos, que pueden fallar en mil detalles, que pueden relacionarlos con su tío, o que alguien que se sabe enemigo del tío, se relacione con ellos como si nada. También resulta un pegote lo de que Ian tenga negocios hoteleros en california, pero si es un “pelagatos”! Como va a llevar negocios a miles de km de distancia! Con el nivel monetario que se le ve cómo vamos a creernos que tiene participaciones en hostelería en USA (puaj!)?
La pareja (de hermanos) protagonista resulta poco empática, tan pobre como escasa en hondura dramática, meros clichés con patas, que terminan por darnos igual lo que les pase. Hablan de modo inverosímil para ser dos tipos sin aparentes estudios, un mecánico y un… y es que no se sabe en que ayuda al padre en el restaurante (es cocinero, camarero, maître, pinche?), pero tenemos que ver natural su modo de expresarse filosófico, frases: "Es curioso cómo la vida se reduce a esto"; "La vida no es nada si no es totalmente irónica"; " Toda la vida humana tiene que ver con la violencia"; "Es gracioso cómo la vida tiene vida propia"; chirrían en sus bocas más que un extraterrestre en “El padrino”; para al final acabar en ua conclusión débil y sin capacidad de emocionarte mínimante al verla venir de lejos.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
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Spoiler:
Ian encarnado por el escocés Ewan McGregor es uno es un vanidoso, pedante, extrovertido, mujeriego, luce coches de lujo del taller de su hermano, para impresionar a las chicas, se cree demasiado bueno para trabajar en el restaurante de su hermano, es un ambicioso que anhela ser rico rápidamente y tener una bella mujer-trofeo. Ewan lo encarna de modo ligero, distendido, con cero intensidad, no te crees su supuesto mundo interior, y cuando al final rompe a un ataque de ira, resulta grimante, actuación ordinaria sin alma; El otro hermano es Terry encarnado por el irlandés Colin Farrell, más taciturno, más noble, pero un ludópata y alcohólico, de carácter frágil. Colin lo interpreta de modo histriónico, con toda una galería de tics y muecas, como bien he leído parece querer emular al James Dean más atormentado y resulta pasado de vueltas; Entre los secundarios está Tom Wilkinson como el tío Howard, gran actor para un papel constreñido y poco verosímil, cumple sin más; Hayley Atwell como Angela Stark, un papel confuso, una percha para Ian, para proyecto su superficialidad con las mujeres, pero la actuación de la actriz es plúmbea; Sally Hawkins como Kate, la mujer de Terry, me queda un cliché como amorosa esposa que no se cuestiona nada.
La puesta en escena resulta simplemente correcta, pero debajo de los cánones que el realizador nos tiene acostumbrados, con diseño de producción de Maria Djurkovic (“El topo” o “The imitation game”), que hace lucir exteriores naturales de Londres y alrededores (Grand Union Canal; Thames riverbanks; Barlby Road- Kensington; All Saints Church-Chelsea; Overstone Road-Hammersmith; Claridge's Hotel - Brook Street; Tower Bridge) y en Beaulieu-Hampshire, y Brighton-East Sussex; Esto filtrado por la convencional cinematografía del húngaro Vilmos Zsigmond (“Encuentros en la tercera fase” o “El cazador”); Destaco la música compuesta por Philp Glass (“Las horas “ o “El ilusionista”), con melodías disonantes de piano que emiten intriga y ponen alerta, lástima que adornen un relato endeble.
Spoiler:
Que la mujer de Terry, Kate, diga que ha matado a alguien pero ella lo tome por loco, sin interesarse por sí es verdad o no cruje; Que Kate no se escame cuando dice a Terry de llevar a su hermano al médico y este se niega, resulta de ingenuo; Que Terry amenace a Ian con que va a delatarse a la policía y con ello al hermano, y que este espere que no pase nada me es estridente, cuando sabe cómo se las gasta su tío cuando está arrinconado; Que Terry empuje en el barco a su hermano al suelo y este se rompa como si fuera de papel resulta risible.
También Allen se auto plagia en la escena en que tío Howard bajo la lluvia está junto a los sobrinos bajo un árbol contándoles lo que requiere de ellos, momento clave; esto está claramente en sintonía con “Match Point”, cuando los dos amantes Nola (Scarlett Johanson) y Nolan (Jonathan Rhys Meyers) se besan bajo otro árbol un día pluvioso.
En conjunto me queda un película pasable, que encima estando bajo la medida alleniana defrauda. Esta fue su tercera cinta británica tras las de los dos años anteriores “Match Point” y “Scoop”, y fue la más pobre sin duda, luego volvió a USA. Fuerza y honor!!!
La puesta en escena resulta simplemente correcta, pero debajo de los cánones que el realizador nos tiene acostumbrados, con diseño de producción de Maria Djurkovic (“El topo” o “The imitation game”), que hace lucir exteriores naturales de Londres y alrededores (Grand Union Canal; Thames riverbanks; Barlby Road- Kensington; All Saints Church-Chelsea; Overstone Road-Hammersmith; Claridge's Hotel - Brook Street; Tower Bridge) y en Beaulieu-Hampshire, y Brighton-East Sussex; Esto filtrado por la convencional cinematografía del húngaro Vilmos Zsigmond (“Encuentros en la tercera fase” o “El cazador”); Destaco la música compuesta por Philp Glass (“Las horas “ o “El ilusionista”), con melodías disonantes de piano que emiten intriga y ponen alerta, lástima que adornen un relato endeble.
Spoiler:
Que la mujer de Terry, Kate, diga que ha matado a alguien pero ella lo tome por loco, sin interesarse por sí es verdad o no cruje; Que Kate no se escame cuando dice a Terry de llevar a su hermano al médico y este se niega, resulta de ingenuo; Que Terry amenace a Ian con que va a delatarse a la policía y con ello al hermano, y que este espere que no pase nada me es estridente, cuando sabe cómo se las gasta su tío cuando está arrinconado; Que Terry empuje en el barco a su hermano al suelo y este se rompa como si fuera de papel resulta risible.
También Allen se auto plagia en la escena en que tío Howard bajo la lluvia está junto a los sobrinos bajo un árbol contándoles lo que requiere de ellos, momento clave; esto está claramente en sintonía con “Match Point”, cuando los dos amantes Nola (Scarlett Johanson) y Nolan (Jonathan Rhys Meyers) se besan bajo otro árbol un día pluvioso.
En conjunto me queda un película pasable, que encima estando bajo la medida alleniana defrauda. Esta fue su tercera cinta británica tras las de los dos años anteriores “Match Point” y “Scoop”, y fue la más pobre sin duda, luego volvió a USA. Fuerza y honor!!!