Sin duda Park Chan-wook es uno de los directores fundamentales de esta década que está a punto de acabar. Su visión del thriller, la violencia y la tensión cinematográfica es absolutamente brillante y sus colaboraciones con el grandísimo actor Song Kang-ho han dado una serie de películas memorables y esta es la primera colaboración entre ambos.
Fue en el año 1945, cuando las dos superpotencias, EEUU y la URSS, decidieron repartirse ciertas áreas de influencia en el mundo. Corea quedó dividida en dos: Corea del Norte con influencia comunista y Corea del Sur con influencia capitalista. Las tensiones entre las dos Coreas han sido innumerables, protagonizando la famosa Guerra de Corea a principios de los años 50 y numerosas tensiones diplomáticas durante 50 años más. Finalmente, ambos países aceptaron las fronteras actuales y una zona de exclusión que está regulada por países neutrales y que se denomina Área de Seguridad Compartida, esta zona es la que da el título a la película y es donde trascurre la acción.
La historia comienza por el final, cuando los hechos han sido consumados, podrías pensar en la típica película de investigación militar, pero rápidamente la película se convierte en una historia lírica sobre la amistad, sobre el pasado y el futuro de las dos Coreas, todo narrado con tensión, desgranando poco a poco las piezas que conforman un puzzle demasiado complejo para poder resolverlo de un único vistazo. La película tiene unos grandes diálogos, una gran fotografía, mimando los detalles, cuenta con sentido del humor y una gran historia.
Para todos. .
Lo mejor: la trama que engancha, Song Kang-ho.
Lo peor: .